La flota del golfo de Cádiz acepta volver a faenar para negociar con la Junta

La flota pesquera del golfo de Cádiz volverá a faenar el lunes. Los pescadores y armadores que estaban en huelga desde el pasado 27 de febrero aceptaron ayer la condición que había puesto el consejero de Agricultura y Pesca, Isaías Pérez Saldaña, para negociar. A esa reunión irán representantes de los cinco puertos afectados, que ayer también decidieron darse de baja de las federaciones regionales de cofradías y armadores.

Los representantes de los cinco puertos en paro (Isla Cristina, Punta del Moral, Lepe, Puerto de santa María y Sanlúcar de Barrameda) confirmaron la decisión de aceptar la oferta del consejero de Agricultura. "Ante el ultimátum lanzado por la Administración, hemos decidido volver al mar", explicó José Antonio Carrillo, representante de los armadores de Isla Cristina.

Con sus protestas, armadores y pescadores exigen una equiparación de las tallas mínimas de las capturas entre el Mediterráneo y el Atlántico, el pago de las ayudas al gasóleo, más medidas de control sobre los ilegales que pescan en el golfo y un nuevo acuerdo sobre los límites marinos entre España y Portugal.

Carrillo agregó que también habían decidido desvincularse de las diferentes asociaciones y federaciones andaluzas de su sector para constituir una nueva que represente a los puertos del golfo de Cádiz. El representante pesquero desligó la decisión tomada en la asamblea de la visita que el líder del PP andaluz, Javier Arenas, realizó por la mañana a los marineros.

Arenas dio su apoyo a los marineros en sus reclamaciones y exigió a la Junta de Andalucía que negociara. Un gesto que fue muy criticado por el consejero de Agricultura, quien recordó que el incremento del control sobre la talla de las capturas en el Golfo se debe a una triple amenaza de sanción de la Comisión Europea por "pesca de inmaduros en 2000, 2001 y 2003, cuando gobernaba el PP".