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Reportaje:

El espectáculo frente a la información

Responsables televisivos reflexionan sobre las dificultades para llegar al fondo de las noticias en la pequeña pantalla

Juan Cruz

Ed Murrow, el periodista que derrotó al senador integrista norteamericano J. R. McCarthy, advirtió de que la información en televisión estaba a punto de ser derrotada por el espectáculo.

El eco de su advertencia, hecha hace cincuenta años, ha llegado ahora amplificado gracias a la película de George Clooney Buenas noches, y buena suerte, que era la despedida habitual de Murrow.

El programa con el que Murrow acabó con McCarthy, el político que hizo de la bandera de su patriotismo un arma para cazar comunistas, se emitió el 9 de marzo de 1952. Cincuenta y cuatro años más tarde ese programa y aquella advertencia alcanzan la vigencia de esta pregunta: ¿ha perdido la información a favor del espectáculo?

"Hace tiempo que la televisión opta por el espectáculo: muchos sucesos, mucho escote"

Hemos pedido a algunos profesionales del medio que vieran la película y que nos contaran sus conclusiones.

Alicia Gómez Montano, directora de Informe Semanal (TVE): "Es un puñetazo en la barriga. Alude a lo que sigue pasando en Estados Unidos, y a lo que pasa intermitentemente en todos los países democráticos cuando ha habido presiones excesivas sobre la televisión como servicio público. Murrow quería mostrar los hechos, de ese modo derrotó a McCarthy. Murrow tenía un solo poder, el del periodismo, estaba sólo ante el peligro. El que más se parece aquí a Murrow es Iñaki Gabilondo... Mostró momentos de extrema fortaleza frente al gobierno de José María Aznar cuando juzgó que había hechos que había que exponer, Pero detrás suyo sólo había periodismo. La televisión hace tiempo que opta por el espectáculo frente a la información: muchos sucesos, mucho escote. ¿Presiones? Algunos momentos que hemos vivido en la pública: ya está en los libros de historia la presión política que cayó sobre nosotros entre 2002 y 2004, cuando TVE fue obligada a comportarse como una televisión de partido y no como un servicio público".

Pedro Piqueras, director de Informativos de Tele5 y del informativo de la noche: "El entretenimiento ha ganado la partida; aquello que no es entretenido la televisión no lo emite. Lo que antes era carne de programas de modas o de El Caso ha pasado a ser materia de informativos. Se sirve a la imagen, el mensaje es el medio. Los contenidos que han de explicarse se eliminan. La televisión busca su propio camino, su lenguaje. ¿El poder? Siempre tratará de imponerse sobre ella, pero no sólo el poder político, sino también los poderes económicos, cualquier poder querrá siempre manejar los hilos. Viendo la película he sentido verdaderos escalofríos imaginando paralelismos que se pueden producir hoy mismo; lo que tenemos que hacer es pensar siempre cómo sortear determinadas presiones".

Óscar Vázquez, director del informativo de la noche de Antena 3: "Me impresionó esa frase de Murrow: 'Somos defensores de la libertad. No podemos defender la libertad ajena si no somos capaces de defender la nuestra'. No ha pasado tanto tiempo desde que hizo Murrow esa advertencia... Y esas presiones externas, la política, la empresarial, siguen existiendo. Hay que estar en un medio poderoso para que éste no te ayude a ceder, y tener las cosas claras, y un punto de valentía. En la película es obvio que la televisión estaba ya entregada a los intereses publicitarios, y a los dictámenes de la audiencia. Murrow y su equipo se ofrecen a pagar lo que sufraga el patrocinador de su programa. ¡Hoy en día no me imagino ni a Matías [Prats, el presentador del informativo que dirige] ni a mi dando parte de nuestro sueldo para que siga el noticiario! Tenemos que hacer el mejor informativo posible, sin renunciar al entretenimiento. Nosotros no podemos competir con el periodismo de análisis, ¡se nos iría la audiencia!".

Matías Prats, presentador del informativo nocturno de Antena 3: "¡Salí del cine buscando aire puro, se fuma tanto en la película! ¿Entretenimiento, información? Un informativo debe contener lo que interesa a los espectadores. ¿Lo sabemos? Debe ser que sí, porque nos siguen. Hay que formar, entretener, e informar, se decía. Yo creo que ahora la tele está para informar y entretener. ¿Formar? Es demasiado pedirnos a la televisión".

Lorenzo Milá, presentador del telediario de la noche de TVE: "La televisión es un recipiente en el que cabe todo, la vida entera, y a los informativos les pasa lo mismo. Lo cierto es que los informativos son más romos, menos combativos, se mojan menos. Las corporaciones, los gobiernos, los poderes van ganando la partida, hacen que los periodistas pierdan crítica y mordiente... Pasa en Estados Unidos: los informativos públicos, prestigiosos, tienen una presencia social muy residual, muy baja... La lucha es porque te vea más gente, no porque seas mejor, o más creíble. No necesariamente el informativo más visto es el mejor. ¿Murrow? Para que haya gente así tiene que haber en la sociedad una inquietud que lo sustente. Esa actitud, tomada en solitario, conduce al suicidio. ¿El periodismo, hoy? Convive un periodismo ligero y adormilado con otro más sólido y riguroso. Cuesta encontrarlo; el periodismo está secuestrado por los políticos, que llenan los medios de declaraciones y de contradeclaraciones, nos usan para intercambiarse mensajes".

Lorenzo Milá y Matías Prats
Lorenzo Milá y Matías Prats
Ed Murrow e Iñaki Gabilondo.
Ed Murrow e Iñaki Gabilondo.

"La complejidad está en horas bajas"

"La complejidad está en horas bajas", dice Iñaki Gabilondo, director del informativo de la noche de Cuatro. "La televisión ya se ha lanzado a la lógica del mundo del espectáculo. Persigue los fuegos artificales, y ahí la complejidad pierde la batalla. No es un caso aislado. ¿No le pasa también a la radio, y la prensa no tiene dificultades para hacerse con lectores dispuestos a sentarse a leer noticias sesudas, profundas? Vivimos en un zapping incesante. La gente pasará de la ignorancia al puente de acceso al conocimiento, ya no podemos hacernos la ilusión de que estos medios nuestros sirvan para que se pase de la ignorancia al conocimiento. Pero no se debe mirar sólo a los pecados de la televisión: todos los medios padecen de la misma prisa".

Francesc Escribano, el director de TV3, cree que los problemas empiezan cuando al espectador se le mira como a un consumidor, y no como a un ciudadano: "Hay determinadas cosas que están por encima del negocio. En la televisión pública al menos tenemos el control del Parlamento; los que controlan las privadas buscan el negocio". En todo caso, dice Escribano, "nuestro trabajo consiste, muchas veces, como en la película, en administrar presiones".

Montserrat Domínguez (Antena 3, El ruedo ibérico), estudió en Columbia con Fred Frendly, el productor de Murrow: "Esta película es una joya que debería ser obligatoria para los que confiamos en que aún el periodismo puede explicar lo que pasa, puede enfrentarse a sus propios miedos. Es difícil el diagnóstico de lo que ha de pasar, lo cierto es que hay presiones en cada conciencia profesional, y nosotros debemos defender que la televisión es algo más que un electrodoméstico. No todo vale por la audiencia. Las profecías de Murrow se están cumpliendo".

Vicente Vallés (Tele 5, La mirada crítica): "Las cosas no han cambiado tanto desde Murrow. Cuando él hacía televisión no competía con cien canales, ahora es muy difícil mantener la tensión del espectador con el proceso de paz o los problemas educativos. Si en otra cadena hay fútbol van a abandonarte. Cuando el 11-S el programa más visto en España fue un partido de la Champions en el que jugaba el Madrid. Y Friendly se fue de la CBS porque no le dejaron retransmitir los debates sobre la guerra de Vietnam. ¡La CBS prefería una serie!"

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