La Federación de Municipios reclama un pacto nacional para fomentar el civismo

Una gran mesa de diálogo en la que estén representadas las administraciones, la sociedad civil, entidades culturales, clubes de fútbol, familias y escuelas para discutir cómo actuar contra el vandalismo, la pequeña delincuencia y, en general, cualquier conducta incívica. Esto es lo que reclamó ayer la asamblea de la Federación de Municipios de Cataluña (FMC), que bautizó la iniciativa como Observatorio del Civismo y que deberá englobar desde juristas a vecinos, pasando por políticos, para diseñar las estrategias para fomentar el civismo.

La idea, aún en una fase embrionaria, pretende "generar un espacio que permita abordar los problemas del incivismo", afirmó ayer el presidente de la FMC y alcalde de Sabadell (Vallès Occidental), Manuel Bustos. La federación municipalista ha creado ya una comisión específica para desarrollar el Observatorio del Civismo y ayer, en su 17ª asamblea general, que se celebró en El Vendrell (Baix Penedès), dibujó las líneas maestras de este ente.

La FMC propone poner en marcha un estudio que recoja episodios de incivismo, brotes de violencia o problemas de convivencia en el ámbito catalán. Paralelamente, los datos del análisis deberán contrastarse con la realidad que viven otros países, en un nuevo estudio comparativo. De esta forma la federación pretende obtener una radiografía exhaustiva de la situación real en Cataluña.

Aulas y coloquios

Una vez listo este proceso, el Observatorio del Civismo podrá apuntar soluciones concretas. Bustos avanzó ayer algunas: educación específica en las aulas escolares y coloquios también para adultos. Al margen de estos estudios sociológicos, la federación plantea también que un equipo de juristas estudie fórmulas para el ámbito de la convivencia, en lo referente a leyes u ordenanzas municipales.

La FMC trasladará próximamente esta iniciativa al Gobierno de Cataluñaa. Ayer, el consejero de Relaciones Institucionales, Joan Saura, recibió la idea de forma positiva, aunque matizó que no conocía los detalles de la propuesta.

La federación municipalista considera que las actitudes incívicas tienen su origen en el alejamiento entre la política y el ciudadano. "Se suele decir que cuando en los países nórdicos plantan plantas en una zona verde, los ciudadanos salen a regarlas. Aquí las roban", dice una de las ponencias de la asamblea de ayer. El mismo texto analiza que el franquismo terminó con los ciudadanos para convertirlos en "súbditos", lo que habría generado este alejamiento. La ponencia no se olvida del papel de los ayuntamientos y señala que éstos, en el advenimiento de la democracia, optaron por la "eficacia por encima del debate sobre los mecanismos de toma de decisiones colectivas".

Acuerdo global

Estas son las razones que han llevado a la Federación de Municipios de Cataluña a reclamar un acuerdo global entre clase política, sociedad civil y todos los agentes de la vida pública en general para decidir estrategias que permitan mejorar la convivencia. En definitiva, un "foro común de reflexión y para sugerir propuestas de acción para el conjunto de los entes locales de Cataluña". "Son sólo una minoría los que estropean la convivencia", subrayó Bustos. Pero esta minoría centró ayer la asamblea general de la FMC, tradicionalmente fijada en la financiación de los ayuntamientos.