"Los planes evidencian que hacía falta una política industrial"

Ocho personas trabajan en esta oficina, cuartel general de los planes de competitividad. Planes que marcan las líneas gruesas de evolución de 21 sectores, algunos tradicionales y muchos nuevos. Planes, en cualquier caso, que son la gran apuesta del consejero de Empresa, Justo Nieto, y que desde que se empezaron a elaborar han estado rodeados de polémica. Jaime Gómez, director general de Coordinación de Infraestructuras Científicas y Tecnológicas, defiende las bondades de unos planes que asegura tienen garantizada la financiación y que ya están dando frutos.

Pregunta. ¿Qué porcentaje de las medidas que recogen los planes son nuevas?

Respuesta. No sé decir. Puedo contestar que la elaboración de los planes ha supuesto identificar sectores que no estaban ni siquiera reconocidos como tales. El más importante puede ser el sociosanitario, que tiene 11 pequeños subsectores. Es un sector muy heterogéneo y ni siquiera tenía conciencia de nada. Ahora están trabajando para tener una asociación. En todos los sectores emergentes, por ejemplo, realmente son nuevas medidas y aunque no recuerdo la proporción monetaria, un tercio de la cantidad global iría a los sectores emergentes y dos tercios a los sectores consolidados. Y líneas concretas, hay líneas nuevas en los planes de los sectores consolidados. Temas de asociacionismo, que no se habían considerado, de internacionalización ya que había algunos sectores que estaban mirándose a ellos mismos sin considerar la posibilidad de intentar buscar mercados fuera.

"Tenemos la promesa de Camps de que si hace falta más dinero se pondrá más dinero"

"Este año la consejería ya dispone de 50 millones consignados para los planes"

P. ¿Puede hacer un esquema de cómo van a financiarse?

R. Se están financiando ya con fondos directos de la Consejería de Empresa. Creo que la Consejería de Empresa no había puesto jamás tanto dinero en política industrial como actualmente. El año pasado, ya aportamos 13 millones nuevos y, en total, entre Empresa y entidades lo complementaron hasta 22 millones. Es una cantidad muy respetable, considerando que los planes se fueron acabando durante el año. Este año la Consejería ya dispone de 50 millones consignados presupuestariamente para los mismos. Están los compromisos con la comisión de trabajo con el Ministerio de Industria para ver cómo coordinamos acciones y evitar duplicidades.

P. El grueso de la financiación sale de partidas que ya existían, como en el Impiva, y de fondos nuevos. ¿No temen dejar otro frente desatendido?

R. No, la política de la Consejería está claramente reorientada y ahora hay un nuevo Impiva, un nuevo Ivex, un nuevo Sepiva, orientado a la competitividad. Creo que ha cambiado la política de la Consejería. Hay un nuevo Impiva con nuevas líneas y maneras de impulsar los distintos sectores, un nuevo Sepiva que gestiona no sólo el suelo para parques empresariales sino también científicos y hay un nuevo Ivex que va a tener mayor financiación para internacionalización. En definitiva, hay una nueva política industrial. En definitiva, como dice el consejero, los planes no son más que una cortada para poner sobre la mesa que hacía falta una política industrial y tenemos unos planes que han sido redactados en consenso con los sectores que los reconocen como suyos.

P. De todo el dinero que se va a destinar este año a los planes. ¿Qué porcentaje aproximado serán fondos nuevos y de donde piensan sacarlos?

R. El tema de la financiación es historia. Tenemos el dinero suficiente y la promesa del presidente de que si hace falta más dinero se inyectará más dinero.

P. Una de las críticas más repetidas es que no hay nuevos fondos

R. Lo que deberían mirar son los frutos que los planes están produciendo ya. Por ejemplo, la Pasarela del Carmen de hace unos días. ¿Cuándo ha habido una como esa? Todo el mundo de la moda y los complementos se está viendo arropado, sabe que próximamente va a haber una semana de la moda donde van a venir los marroquineros y los que tengan complementos que antes no habían tenido dónde exhibir sus productos.

P. ¿Por qué se optó finalmente por presentar el plan textil sin incluir la parte que el sector negocia con el IVF (Instituto Valenciano de Finanzas)?

R. Porque no pudimos cerrar el fleco. Lo que nos correspondía a nosotros y de lo que teníamos que responsabilizarnos estábamos todos de acuerdo desde hace un año. El plan textil fue el primero que se puso en redacción. Decidimos que teníamos que presentarlo, por lo menos en la parte en la que nosotros podíamos impulsar el sector. Es cierto que se han quedado dos líneas fuera que es importante que se financien. También el gobierno tiene parte de responsabilidad.

P. Pero de cara a la efectividad de un plan, cuanto más completo mejor.

R. Estoy de acuerdo en que lo mejor hubiera sido presentarlo en su totalidad, pero tampoco tenía mucho sentido continuar reteniendo un plan escrito y valorado, a falta de esas dos medidas. Sé que se está trabajando en ellos y que acabarán cerrándose.

P. Los sindicatos han criticado que no se haya contado con ellos. ¿No hubiera sido más práctico involucrar a los representantes de los trabajadores en la elaboración de unos planes que directamente les afectan al final?

R. No conozco el detalle de cómo se ha llevado la negociación en lo que concierne a los trabajadores en el plan textil, que creo que es el único plan en el que realmente las medidas afectan muy directamente a los trabajadores, pero estaba involucrada la Consejería de Economía. En el resto de planes, las medidas son más bien empresariales, orientadas o a las asociaciones o a las empresas, que no involucran tanto al trabajador y no creo que sea necesario que estuvieran los sindicatos. Cuando salieron aquellas declaraciones por parte de los sindicatos e incluso por parte de la cúpula empresarial fue un momento de desencuentro, pero ahora mismo la comisión de industria de la Confederación Empresarial Valenciana ha venido ya un par de veces a verme porque quiere hacer un seguimiento de cómo se están distribuyendo el dinero, cómo se están ejecutando los planes. Es decir, que ahora mismo es la propia cúpula empresarial la que está detrás de los planes. Aquello fue un momento de desencuentro desafortunado, pero ya está superado.