La falta de camas en intensivos satura los principales hospitales

El lunes pasado no había ninguna cama para pacientes de vigilancia intensiva o reanimación libre en los hospitales públicos valencianos. Pero tampoco en los privados hacia donde se suelen derivar pacientes cuando faltan camas, según informaron a este diario trabajadores de este servicio. El martes la situación fue algo mejor, pero se mantuvieron los problemas en los principales hospitales. Fue el caso de La Fe, al que numerosos centros de la provincia de Valencia se dirigieron para enviar enfermos. El principal hospital de la red pública tuvo que denegar estas solicitudes ante la falta de recursos para alojarlos, según las mismas fuentes.

La Consejería de Sanidad sostiene que puntualmente hay problemas, especialmente en lo que respecta a camas pediátricas, aunque recientemente no se han detectado."No tenemos conocimiento de problemas de pacientes que no hayan podido estar en unidades de cuidados intensivos (UCI)", apuntaron ayer fuentes de la Consejería de Sanidad. La versión de especialistas consultados, sin embargo es opuesta: "Tenemos un ratio muy escaso de camas de agudos por habitante y de ellas, muy pocas son de UCI".

Esta circunstancia hace que sea frecuente el traslado de enfermos en ambulancias medicalizadas de un hospital que se ha quedado corto de camas a otro, generalmente con destino a los centros más grandes. No es raro, por ejemplo, que se envíen pacientes de Elda o Vinaròs a La Fe en Valencia. Se trata de un riesgo añadido al grave pronóstico que presentan estos pacientes que han sufrido politraumatismos graves, descompensaciones diabéticas, infartados o hemorragias cerebrales y que no pueden ser atendidos en su lugar de origen.

El primer paso es buscar camas en centros públicos y, sin no hay disponibilidad en éstos, buscar en los privados. El lunes, tanto unos como otros estaban en unos niveles de ocupación tales que hacían imposible el intercambio de pacientes, según las fuentes consultadas. "El número de camas pare enfermos graves es absolutamente deficitaria", señalaban, "hay unos niveles de ocupación entre el 90% y el 95% y cuando por cualquier circunstancia se da una acumulación de pacientes, se saturan los centros más pequeños y se envían a los hospitales de mayor capacidad".

Pese a haberse producido algunas ampliaciones como el hospital Peset o la apertura del centro de la Ribera en 1999, que supuso un balón de oxígeno para combatir este problema, en poco tiempo han vuelto a alcanzarse los niveles de ocupación anteriores y se reproduce el problema.

Unidades infantiles

Ayer, Sanidad admitió que puede haber problemas puntuales, especialmente en las UCI infantiles, aunque negó que éste fuera el caso. "Si esto ocurre se establecen conciertos con centros privados para atender al exceso de demanda, como sucede con los picos de la gripe, y en este caso no ha habido necesidad de hacerlo, prueba de que no ha habido problemas", señalaron. "Si no hay plazas en los centros públicos, los hospitales se ponen en contacto con la consejería para acudir a los centros privados y no se han realizado estas llamadas", insistieron. Con todo, anunciaron que está previsto poner en marcha nuevos recursos para ampliar las camas de cuidados intensivos. En la provincia de Castellón está programada la ampliación de la UCI en La Plana y Vinaròs, además del Provincial. En Valencia, habrá más camas con la entrada en funcionamiento del hospital de Manises y hay seis plazas disponibles en el hospital Militar por si fueran necesarias. Junto a ello, en Alicante el hospital de Torrevieja tendrá 15 plazas, el hospital General abrirá seis puestos de reanimación y el hospital de Elche-Crevillent aportará 15 plazas más.