Una fundación para 'amigos de toda la vida'
Desde 1987 la Fundación Afinity (antes Purina) trabaja en defensa de los derechos y la plena integración en la sociedad de los animales de compañía. "Las mascotas son fuentes de salud", afirma María Azkargorta, directora de esta entidad privada sin ánimo de lucro.
Hace ahora quince años que Afinity comenzó a realizar terapias asistidas con animales de compañía. Los pacientes a los que van dirigidos sus programas suelen tener algún tipo de carencia, ya sea afectiva, cognitiva o motriz. Además de en hospitales psiquiátricos, trabajan en cárceles, geriátricos, escuelas para niños autistas y centros de menores. "Depende de donde se haga, se incidirá en una cosa o en otra. Por ejemplo, con los ancianos trabajamos la psicomotricidad y en la prisión la afectividad", continúa Azkargorta.
La adquisición de los canes cuesta a la fundación de 600 a 900 euros. "Solemos acudir a criadores de confianza, pues debe tratarse de animales muy tranquilos y manejables", explica la directora. Las razas más afables para estas tareas, según informa, son Labrador y Golden.
Después de un tiempo de convivencia con los animales, en los casos de internos psiquiátricos se observan resultados patentes. "Menor agresividad y conflictividad, mayor autoestima, mejora del clima en el centro, pues hay más alegría y más comunicación de experiencias, etcétera".
Además de estos programas, Afinity se dedica a otras tareas en pro de los animales domésticos. Entre ellas, están las campañas de concienciación social. Lemas como "Él nunca lo haría, no lo abandones"; "Él lo haría todo por ti", "Funciona sin pilas. Nunca es tarde para hacer buenos amigos" o "Amigos de toda la vida" han aparecido a menudo en los medios de comunicación.
La fundación realiza también cada cierto tiempo congresos específicos para especialistas en animales. El próximo, sobre terapias afectivas, se hará en 2007.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.