"Cataluña tiene derecho a tener una política propia sobre la prostitución"

La consejera de Interior de la Generalitat, Montserrat Tura, se encuentra en el centro de una polémica surgida como consecuencia de una iniciativa legal con la que pretende regular la prostitución en Cataluña. Los informes en contra, del Gobierno central parecen no impresionar a esta enérgica mujer, de 51 años, que sigue adelante con su proyecto.

Pregunta. ¿De dónde surge esta iniciativa?

Respuesta. Del Pacte del Tinell. Algunos sectores críticos olvidan a menudo que este proyecto está contemplado entre los diversos acuerdos del Pacte del Tinell [documento que recoge el programa de Gobierno del tripartito, en diciembre 2003]. Es extraño que ahora estos sectores disidentes se sorprendan, cuando en realidad no hacemos otra cosa que poner en marcha un acuerdo del que ya hablamos.

"La ley promocionará la autogestión de las prostitutas"

"Los poderes públicos no pueden cerrar los ojos; lo peor es no hacer nada"

P. ¿Pero, por qué ahora?

R. La proliferación de la prostitución en los últimos años ha hecho que la podamos encontrar en todas partes, en aparcamientos, carreteras, en las calles, en espacios infrahumanos. Hay que perseguir policialmente los aspectos delictivos de la prostitución y regular los que se efectúan voluntariamente y de manera libre.

P. ¿No significa legalizar la prostitución?

R. La prostitución en nuestro país no es ilegal, por lo tanto no estamos delante de un proceso de legalización. Estamos delante de un proceso de intervención y limitación del ejercicio de la prostitución.

P. ¿En qué fase está la iniciativa?

R. Estamos en periodo de consulta. El borrador del proyecto ha sido entregado hace algunas semanas a diferentes departamentos de la Generalitat, para que den su opinión. Hemos consultado con centrales sindicales, partidos, asociaciones de mujeres, incluso con el colectivo de trabajadoras del sexo, asociaciones de vecinos, profesionales del derecho, de la policía... ¿Con quién no se piensa consultar? Con los empresarios del sexo; ellos sólo tendrán que cumplir la ley cuando entre en vigor.

P. ¿Para cuándo habrá ley?

R. No quiero hablar de fechas, pero espero que esta ley llegue al Parlament durante la presente legislatura. Al menos éste es el mandato. No pretendemos precipitar nada, el proceso será largo. Me es difícil señalar una fecha.

P. ¿Y qué conseguirán con esta ley?

R. Desaparecerán, por ejemplo, los grandes prostíbulos, sacaremos la prostitución de la calle y los locales en los que se ejerza serán inspeccionados y fiscalizados. La nueva ley permitirá cerrar de manera inmediata aquellos locales que infringen las normas. En definitiva, pondremos fin a la situación indefinida y poco clara en la que no se sabe qué ley se debe aplicar; si la de Actividades Diversas o la de Espectáculos. Los empresarios que hasta ahora se han creído propietarios de un grupo de mujeres, que podían traficar con ellas, pasarán a ser alquiladores de habitaciones. Se promociona la autogestión de las prostitutas.

P. ¿Qué opina de las feministas que se oponen a la regulación?

R. A mí también me gustaría un mundo sin prostitución. Pero la realidad es la que es. Si insistimos en un debate maximalista de abolición total, lo que pasará es que durante años y años acabaremos por no hacer nada. Lo peor es no hacer nada con respecto a este tema. Los poderes públicos no podemos cerrar los ojos.

P. ¿Le ha sorprendido el informe en su contra del Instituto de la Mujer, diciendo que es una materia sobre la que no puede legislar Cataluña?

R. No conozco el informe. A través de lo que he podido leer en su periódico, llego a la conclusión de que es lícito que recoja una parte del pensamiento feminista, yo también me considero feminista. Pero hay otra parte de las feministas que no pensamos así. En cualquier caso, reclamo el derecho a que Cataluña tenga una política propia sobre la prostitución.

P. El informe señala conflictos de competencias en materia laboral y de sanidad

R. Los borradores que hasta ahora hemos elaborado no entran en materia laboral o del derecho del trabajo, que es cierto que es una competencia del Estado. En lo que hace referencia a determinados aspectos sanitarios, le recordaría que la Generalitat tiene competencias en estas materias. No veo qué problema competencial podemos tener con el Estado. Me da la sensación de que quienes han redactado el informe no se han leído el borrador de ley, y que se han posicionado demasiado rápido en contra.

P. Y mientras se prepara la ley, ¿qué hace frente a la prostitución?

R. La actividad policial es permanente y constante, pero vamos a intensificarla. Estamos acabando de perfilar un plan de lucha contra la explotación sexual y el tráfico de personas. Pero para llevarlo a término hemos llegado a la conclusión de que el Estado debe modificar la tipificación de determinados delitos sexuales, como una concepción más precisa y extensiva del proxenetismo, endurecimiento de las penas por tráfico de personas para ser explotadas sexualmente o perseguir el turismo sexual de menores.