La brecha de inflación española con la zona euro alcanza su máximo en enero

El descontrol de la inflación española se puso ayer de nuevo de manifiesto al conocerse la subida de los precios en enero en la zona euro, que se situó en el 2,4%. La inflación en España fue muy superior, hasta el 4,2%, lo que significa que la diferencia entre España y la zona euro en evolución de precios se sitúa ya en 1,8 puntos, la brecha más amplia desde que se comparan estas estadísticas con fuentes homogéneas.

Aunque los datos definitivos de la inflación europea no se conocerán hasta el próximo día 28, el avance publicado ayer por Eurostat, la oficina estadística comunitaria, suele variar muy poco de la cifra final. El mayor crecimiento de los precios españoles respecto a los europeos es el indicador que mejor refleja la pérdida de competitividad de la economía española que sufren de manera directa los exportadores. De confirmarse la cifra, se trataría de la mayor brecha desde que existe el índice de precios al consumo (IPC) armonizado, en 1997.

La subida de los precios en la zona euro respecto a diciembre (2,4%) ya había sido anticipada por numerosos economistas y gabinetes de análisis, que habían manifestado su preocupación por las dificultades de cumplir los objetivos del Banco Central Europeo (BCE) de "menos del 2%, pero próximo al 2%". El presidente del BCE, Jean-Claude Trichet, ya anticipó el pasado jueves la posibilidad de que la inflación subiera, debido en buena parte "al incremento de los precios de la energía y al crecimiento de los préstamos hipotecarios".

Es sintomático el precio del barril de petróleo, que oscila entre los 65 y 68 dólares en el mercado de Nueva York. El gobernador del BCE justificó precisamente el posible endurecimiento de la política monetaria "en un aumento creciente del riesgo de inflación" provocado por el encarecimiento del petróleo desde el pasado enero.

Las manifestaciones y cautelas expresadas por Trichet sobre la probable subida del precio del dinero han sido interpretadas por muchos analistas como un anuncio de una próxima subida de los tipos por parte del BCE. Los tipos podrían subir al 2,50%, frente al 2,25% actual. Dada la sostenida recuperación de la economía europea, algunas fuentes no descartan una subida de hasta medio punto.

El dato de inflación coincidió con el índice de precios industriales, que en diciembre subió el 0,2% en la Europa de 25 Estados. En España, la producción industrial permaneció estancada, con una variación media anual del 0,6%.