El tráfico en la almendra central de Madrid ha descendido el 12% en tres años

El tráfico se ha reducido en Madrid, aunque en los atascos de plena hora punta no lo parezca. La circulación ha descendido el 12% respecto a 2003, cuando Alberto Ruiz-Gallardón llegó a la alcaldía. Eso es lo que reflejan los datos de la Dirección General de Movilidad, obtenidos a partir de los vehículos fichados cada día por más de 3.000 sensores distribuidos por el asfalto de la ciudad. Traducir ese descenso porcentual en coches reales es difícil, porque no todos los vehículos pasan por los sensores, y otros pasan varias veces.

Pero el Ayuntamiento ofrece dos datos: en el distrito Centro circulan unos 275.000 coches al día, 35.000 menos que hace dos años y medio; y el número de movimientos registrado justo tras atravesar la M-30 -es decir, el de los coches que cruzan esa frontera para acceder a los distritos centrales- pasa de 611.000 movimientos diarios a 533.000: unos 75.000 movimientos menos. El anillo de la M-30 propiamente dicho, en obras desde septiembre de 2004, no registra variaciones sustanciales en su volumen de tráfico.

La Concejalía de Seguridad y Servicios a la Comunidad, dirigida por Pedro Calvo, atribuye ese descenso en el número de coches a la política llevada a cabo en este mandato: extensión de la red de parquímetros -aparcamientos de pago y con un tiempo máximo de estancia-, restricciones al tráfico en el barrio de Cortes y en el entorno de Sol, cortes parciales en la Casa de Campo y el parque del Oeste... "Estamos enviando un mensaje a los conductores: es mucho más cómodo venir a Madrid en transporte público", asegura Javier Conde, director general de Movilidad.

PSOE e IU, sin embargo, señalan otra razón de peso: las obras. "Se reduce el número de coches, pero es que también hay menos espacio físico para circular. Entrar en Madrid es una aventura", afirma la oposición.