"Ibarretxe y Egibar resucitan el plan porque no tienen ideas nuevas"

El nuevo líder de las Juventudes Socialistas de Euskadi, Ekain Rico (Bilbao, 1979), lleva en su muñeca izquierda una pulsera de goma con dos palabras: Paz-Bakea. Este abogado forma parte de la legión de convencidos que ha hecho Zapatero que piensan que el fin de ETA está cerca.

Pregunta. ¿Será difícil cubrir la figura de su antecesor, Eduardo Madina, pese al respaldo del 94,4% obtenido?

Respuesta. No me planteo llenar ningún espacio, aunque seré continuista. Mi trabajo será muy político: salir a la calle para ser voceros de los problemas reales y proponer soluciones.

P. En su primer discurso tras ser elegido en diciembre recordó su condición de parado.

R. Hay que acabar con las mentiras y debates intencionados de los nacionalistas. El PNV, desde la llegada de la democracia, ha usado muchos discursos para tapar problemas reales, y eso ha pervertido a la sociedad. La gente se pregunta si esta Arcadia feliz que nos dibuja el Gobierno vasco existe. ¿Entonces, por qué estoy parado o no tengo una vivienda o por qué es tan difícil emanciparse? Por no citar la siniestralidad, las listas de espera, la temporalidad o la precariedad laboral. Y, aun así, no hay diálogo social o se plantean barbaridades como lo de las pensiones de Azkarraga. Si un político no soluciona problemas, ¿de qué sirve?

"Desde la llegada de la democracia, el PNV ha usado muchos discursos para tapar problemas reales, y eso ha pervertido a la sociedad vasca"

"Batasuna tiene que exigirse a sí misma la valentía que predica para los demás y decirle a ETA que nunca ha tenido sentido"

P. El PNV le pide a Zapatero para 2006 la misma valentía que la demostrada con la resolución del Congreso sobre el final de ETA de mayo pasado.

R. Le toca a otros demostrar esa valentía, algo que Zapatero y Patxi López ya han tenido. El PSE no sigue ninguna estela de la era Aznar, mientras que el PNV vuelve a sacar a pasear el plan Ibarretxe. ¿No será el PNV el que está aún con el chip de la era Aznar?

P. ¿Por qué Ibarretxe y Egibar intentan resucitar el plan?

R. Es lo que pasa cuando no se tienen ideas nuevas. El plan Ibarretxe es fruto de una etapa pasada, la de la confrontación.

P. ¿Y la doble llave que plantea el PNV en su último texto: no imponer, no impedir?

R. El Congreso no impide nada. Asumamos cuáles son las reglas del juego: al Parlamento vasco le toca aprobar un proyecto y al Congreso llegar a acuerdos, como ahora con el Estatut. Y, después, un referéndum para ratificar el nuevo Estatuto.

P. Ricardo Blázquez, presidente de la Conferencia Episcopal, afirma que hay que aprovechar todos los resquicios para lograr la paz. Como Zapatero.

R. Nunca me ha gustado que los curas o los militares se metan en política. Lo mismo que el general Mena se tiene que ahorrar sus comentarios, a monseñor Blázquez no le gustaría que un político subiera al púlpito a echar un sermón. Creo en la separación de Iglesia y Estado: en la Iglesia, Dios; en la política, los políticos.

P. ¿Por qué este año, como dice Zapatero, va a ser mejor que 2005 en el proceso de paz?

R. ETA no ha atentado mortalmente desde hace mucho tiempo. Tengo esperanza por la misma razón que soy revolucionario, por la juventud.

P. A usted no parecen gustarle mucho las sotanas. ¿No cree que todo esto es como una cuestión de fe en el presidente?

R. Es que no me ha dado ninguna razón para dejar de confiar en él. Y si dice que 2006 ojalá sea el año de la paz, pues cumplirá su palabra.

P. ¿Dará Batasuna el paso definitivo a la política el día 21?

R. No lo sé. Es únicamente su responsabilidad, y lo que le exigimos todos, incluso mucha de su gente. Yo exijo valentía a todo el mundo, a mi partido, pero también a Batasuna.

P. No parece suficiente una frase hecha como la de Anoeta de "sacar el conflicto de las calles y llevarlo a la mesa de negociación" y dejar pasar otro año.

R. Tienen que exigirse a sí mismos la valentía que piden a los demás y decirle a ETA que nunca ha tenido sentido. No sé si ETA ha tomado la decisión definitiva y no soy como San Gil, que dice ahora que ETA siempre dice la verdad.

P. ¿Batasuna puede celebrar un congreso?

R. Creo en la separación de poderes. Esa decisión no le compete a los políticos. El PP cree que la política puede intervenir en la justicia, yo no.

P. ¿La iniciativa del juez Marlaska puede ser contraproducente para el recorrido que se espera de Batasuna?

R. Aquí hay un Estado de Derecho donde los jueces aplican la ley. A los políticos nos toca acatar sus resoluciones.

P. Esta estrategia del PP, que algunos llaman de la crispación, no le hace repuntar en las encuestas. Y lo ha intentado con todo: lucha antiterrorista, modelo territorial, incluso con el tema militar en el caso Mena.

R. Y de forma intolerable. Lo terrible es que el PP no haya condenado con claridad las declaraciones de Mena y diga que es normal ese pronunciamiento, dada la situación. Hay que decirle basta ya. Deben dejar de ser la ultraderecha rancia, un partido que sólo conecta con los que iban a la plaza de Oriente.

P. ¿El Gobierno debe flexibilizar la política penitenciaria?

R. La pelota está en el tejado de ETA.

P. ¿Exclusivamente?

R. Creo que sí.

P. Y cuando Zapatero dice que la política puede ayudar al final de ETA sin pagar un precio político...

R. Pero Zapatero ya ha comenzado a hacer política. Ahí está la resolución del Congreso. Ésa es su valentía y la de los que la apoyaron, todos menos el PP. Le toca a ETA.