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Reportaje:

Las otras muertes

Hijos, madres o hermanas de agresores. La Fundación Mujeres añade 32 óbitos por violencia machista a las mujeres computadas en 2004 y 2005

Ana Alfageme

Un hombre mata a su ex mujer y a dos de sus hijos tras encerrarlos en su vivienda y prenderles fuego. Hallan los cadáveres apuñalados de una mujer y sus dos hijos en Barcelona. Un joven acaba con la vida de su madre a puñaladas y la tira por la ventana de un segundo piso. Son titulares informativos similares al que encabeza esta página. Fueron publicados en periódicos durante los años 2004 y 2005.

La Fundación Mujeres ha recopilado las referencias a estos muertos que, según afirman, el cómputo oficial no registra, y los ha incluido en un estudio que ultima para entregar al Instituto de la Mujer. En 2004 fueron 20 víctimas, la mitad menores de edad. En 2005, fallecieron 12, cinco menores entre ellos.

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Estos fallecidos se sumarían al recuento de mujeres asesinadas por su pareja o ex pareja en estos años. En 2005 fueron 62. El año anterior, 72.

"Se trata de hijos de los agresores y de las víctimas, o sólo de las mujeres asesinadas, y también de madres o hermanas de los asesinos, incluso suegras", explica Ángeles Álvarez, de esta fundación, "y pueden haber muerto en el mismo acto sangriento en el que también perdió la vida la mujer que era la pareja o ex pareja del asesino".

Algunas de ellas son lo que la Fundación Mujeres, una ONG especializada en igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres, llama víctimas indirectas, "por ser personas que no parece que fueran destinatarias directas de la violencia". Hay un caso que lo ejemplifica, ocurrido en noviembre de 2004, en el que fallece en Santurce una amiga que estaba en ese momento con la víctima, una ex novia del agresor.

¿Doméstica o sexista?

El recuento también se detiene en el sexo de las víctimas y de los agresores. En el caso de 2004, todos los asesinos, según estos datos, fueron varones. Las víctimas, 13 mujeres y 7 varones, todos ellos menores.

De las 10 víctimas adultas de 2004 que se recogen, hay dos madres de los asesinos; una madre de la compañera; una suegra del agresor, una consuegra y una hermana. Todos los menores son hijos del agresor, salvo una hija de la ex compañera. Incluso se contabiliza una abuela de la víctima, que fallece de un infarto.

En cuanto a las 12 víctimas reseñadas en 2005 por la fundación, cinco son menores (cuatro chicos y una chica). Entre los siete adultos hay un varón, el novio de la ex novia del asesino y cuatro mujeres madres del agresor.

"Estas víctimas también lo son de violencia sexista", señala Álvarez, "por eso reclamamos que se cree el Observatorio contra la Violencia que prevé la ley, para que se refine el cómputo de todas las víctimas reales".

La juez Montserrat Comas, del Observatorio contra la Violencia de Género del Consejo General del Poder Judicial, el órgano de gobierno de los jueces, asegura que sí que se contabilizan en sus estadísticas las víctimas menores de edad de violencia de género.

También señala que la ley define perfectamente lo que son las víctimas de violencia sexista: "Las mujeres muertas a manos de un hombre que es su pareja o ex pareja, y sus hijos menores de edad". Pero advierte de que la ley no contempla como víctimas de violencia de género a una hermana o a una madre del agresor, porque el acto criminal no responde al mismo tipo de motivaciones. "Eso es violencia en el ámbito de la familia, no violencia sexista".

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Sobre la firma

Ana Alfageme
Es reportera de El País Semanal. Sus intereses profesionales giran en torno a los derechos sociales, la salud, el feminismo y la cultura. Ha desarrollado su carrera en EL PAÍS, donde ha sido redactora jefa de Madrid, Proyectos Especiales y Redes Sociales. Ejerció como médica antes de ingresar en el Máster de Periodismo de la UAM y EL PAÍS.

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