_
_
_
_
_
Reportaje:

Mensajería de comercio justo

Una compañía de reparto ha distribuido 1.600 cestas navideñas con un vehículo eléctrico

Barcelona

El pequeño vehículo eléctrico de la cooperativa de mensajería Trèvol ha repartido durante las fiestas navideñas 1.600 cestas con productos procedentes del comercio justo.

La cooperativa emplea bicicletas desde 1992 para transportar documentación y pequeña paquetería urgente dentro de la ciudad de Barcelona, pero hace cinco meses estrenó con la camioneta eléctrica el servicio Ecopack. Desde entonces, en Trèvol esperan que el Ayuntamiento de Barcelona o la Generalitat les contraten "para dar ejemplo de sostenibilidad", afirma Xavier Palos, responsable de la cooperativa.

"Con este transporte eléctrico cerramos el proceso del comercio justo desde el origen a la entrega", añade Palos. De hecho, quieren convertirlo en una herramienta coherente para consolidar la distribución del mercado social (comercio justo, productos ecológicos, cooperativas de consumo responsable), una iniciativa que recibirá ayudas del Departamento de Trabajo de la Generalitat y Un Sol Món. Esta mensajería dispone de 250 productos solidarios que han servido para elaborar las cestas y de una docena de proveedores de comercio justo y cooperativas. Uno de ellos es Cafés Espanica, que distribuye en España el café producido en Nicaragua por las cooperativas de trabajadores que son dueños de la tierra que cultivan.

La batería del Mega le permite recorrer 60 kilómetros y cargar 325 kilos

El único vehículo eléctrico de la flota de Trèvol (14 bicicletas, 6 motos y 6 furgonetas convencionales) hace pocos trayectos, aunque su autonomía da para recorrer 60 kilómetros sin enchufarlo como una lavadora. El servicio todavía no ha cuajado: "Sólo algunos clientes han entendido la coherencia del transporte ecológico", añade Palos. Por este motivo, el Mega, que es así como se llama el vehículo eléctrico, sólo sale a las calles tres veces por semana. El 65% de las necesidades de servicios locales los cubren con bicicletas. En trayectos cortos, de hasta siete kilómetros, la bicicleta es más eficaz y rápida que la motocicleta y la furgoneta convencionales.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Pintado de amarillo y verde con motivos florales, el Mega, fabricado en Igualada, puede cargar hasta 325 kilogramos y circula a un máximo de 45 kilómetros por hora. Ha costado 15.000 euros y el Instituto Catalán de Energía lo ha subvencionado en una tercera parte. En breve instalarán unas placas solares en el techo que aumentarán su autonomía el 18%.

El servicio Ecopack sale por 6,96 euros por dirección y una carga de hasta 40 kilogramos con garantía de entrega en 24 horas: más barato que llevarlo en motocicleta o furgoneta de mensajería convencional, que funciona por horas de servicio. Según el resultado de la actual experiencia, Trèvol prevé introducir un coche solar por distrito y también comenzará a probar motocicletas eléctricas.

La circulación con el Mega es sencilla, aunque exige tener carnet de conducir. Una marcha para adelante y otra para atrás, el velocímetro y un medidor de la energía de las baterías, del que es mejor no quitar ojo. Es tan silencioso que a veces han de tocar el claxon para advertir de su presencia a los peatones imprudentes. Tan sólo ven algo arriesgado circular por la calle de Aragó de Barcelona con el diminuto vehículo cuando va medio vacío porque todo el mundo lo adelanta muy rápidamente.

"Barcelona no está preparada para estos vehículos. Son necesarias plazas de aparcamiento específicas donde también se puedan enchufar", afirman en Trèvol.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_