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La Generalitat prevé que el cuarto cinturón ferroviario esté listo en 2016

El eje orbital aprovechará 51 kilómetros de la red ya existente

Las capitales de comarca de la conurbación de Barcelona dejarán de estar incomunicadas por tren. El futuro cuarto cinturón ferroviario unirá dentro de 10 años estas ciudades de la segunda corona metropolitana, y se estima que lo utilizarán 16 millones de personas cada año. La nueva línea tendrá 106 kilómetros, aunque únicamente se construirán 55, ya que aprovechará parte de las vías actuales.

La nueva línea unirá en menos de dos horas Vilanova i la Geltrú y Mataró, haciendo parada en Martorell, Terrassa, Sabadell y Granollers. De este modo, las ciudades de la segunda corona metropolitana estarán por fin comunicadas por ferrocarril, cumpliendo así una de sus reivindicaciones históricas.

La red ferroviaria catalana tiene un esquema radial: su epicentro es Barcelona, y para desplazarse de una ciudad a otra sigue siendo necesario viajar hasta la capital y hacer transbordo en la estación de Sants. El objetivo de esta línea es que, dentro de 10 años, el tren pueda ser la alternativa al coche para desplazarse entre estas localidades.

En total, la línea orbital tendrá 25 estaciones. En 11 de ellas, habrán enlaces con la red de cercanías de Renfe y Ferrocarrils de la Generalitat (FGC). La Generalitat estima que anualmente el número de usuarios superará los 16 millones cuando la línea esté a pleno rendimiento.

El cuarto cinturón ferroviario tendrá 106 kilómetros, aunque únicamente 55 de ellos serán de nueva construcción. El resto del trazado discurrirá por tramos de la actual red de cercanías de Renfe: el de Vilafranca del Penedès a Martorell, el de Terrassa a Sabadell y el de Mollet del Vallès a Granollers.

Por ello, la nueva línea será de ancho ibérico, el propio de la red de Renfe, y no de ancho europeo, como otras líneas en proyecto como las de alta velocidad o el Eje Transversal ferroviario. En este sentido, el secretario de Movilidad de la Generalitat, Manel Nadal, recordó que el Plan de Infraestructuras del Ejecutivo catalán para los próximos 10 años señala que la toda red ferroviaria tendría que ser de ancho internacional menos la de cercanías, ya que cambiar las vías sería un "caos".

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El consejero de Política Territorial y Obras Públicas, Joaquim Nadal, explicó ayer que la nueva línea orbital ferroviaria "no ahorrará" el cuarto cinturón viario, el proyecto de futura autovía entre Abrera, Terrassa, Sabadell y Granollers. Este proyecto tiene el rechazo frontal de Iniciativa per Catalunya Verds (ICV), uno de los socios del tripartito, y de los colectivos ecologistas.

Con capital privado

El consejero Nadal afirmó que la Generalitat estima que el presupuesto de esta obra superará los 1.200 millones de euros. Prevé que su financiación será a tres bandas: Gobierno central, Ejecutivo autónomo y empresas privadas. Precisamente, Nadal no descartó ayer que compañías de capital privado puedan participar en la futura operadora que explotará la nueva red orbital, encabezada por FGC.

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