Los regantes murcianos ultiman la compra de agua en el Alto Tajo

Los agricultores del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura están ultimando la adquisición de al menos 30 hectómetros cúbicos de agua, aunque podría llegar hasta los 50 hectómetros cúbicos, a los regantes del Alto Tajo y de la cuenca del Guadalquivir, según confirmó ayer a EL PAÍS el director general de Agua del Ministerio de Medio Ambiente, Jaime Palop.

Palop especificó que tanto los murcianos como los alicantinos tratan de evitar la pérdida de los cultivos, como por ejemplo los frutales, los más rentables de la Unión Europea.

El Ministerio de Medio Ambiente ha sido el que ha puesto en contacto a las comunidades de regantes para que inicien las conversaciones para la cesión de los derechos sobre el agua, algo que es posible gracias al decreto aprobado recientemente por el Gobierno central que permite la cesión de derechos entre las diferentes cuencas que ya están conectadas, ya que la creación de nuevos canales, como por ejemplo podría ser el del Ebro está descartado por el departamento que dirige Cristina Narbona, "ya que no sería rentable".

En estos momentos, el escollo está en el precio del agua, que los agricultores del Alto Tajo, cuyos cultivos no son tan eficientes como los de los murcianos, consideran que deberían ser de 0,22 euros el metro cúbico, una cantidad de rebaja hasta la mitad el presidente del Sindicato Central, Francisco del Amor, quien está encabezando las negociaciones, que podrían llegar a buen término en las próximas semanas.

El director general de Agua especificó ayer que los intercambios de agua no equivalen a un mercado libre, sino que por el contrario "todo el proceso está siendo auspiciado por Medio Ambiente, por lo que así evitamos los posibles abusos, y que la propia cuenca cedente, la del Tajo, pueda quedar desabastecida".

Para consumo humano

En cuanto a la decisión del Consejo de Ministros de hoy sobre la cantidad de agua que se trasvasará a la cuenca del Segura, Palop adelantó que en su informe ha aconsejado que se envíe exclusivamente los 39 hectómetros cúbicos necesarios para el abastecimiento humano de Alicante, Murcia y Almería, mientras que los 20 hectómetros cúbicos necesarios para el sostenimiento del Parque Nacional de Las Tablas de Daimiel no se liberarán ahora, "aunque deberá hacerse antes de marzo para evitar la evaporación", puntualizó Palop.

El representante de los regantes murcianos, quien asume que hoy no recibirá agua del trasvase, recuerda que un dictamen realizado en 1992 por el jurista Jesús González Pérez, señaló que la prioridad a la hora de utilizar los recursos de Entrepeñas y Buendía es para los agricultores murcianos y no para el Parque Nacional.

En el PP murciano no ha gustado la posibilidad de comprar agua en el Alto Tajo y en el Guadalquivir. El diputado del PP en el Congreso Alberto Garre aseguró que "tras su fracaso, el Gobierno socialista pretende vender agua a la Región de Murcia, que es lo que persigue el decreto. Lo que ha votado el PSOE es una pura estafa a la Región de Murcia".