La Generalitat descarta crear una 'policía' antitabaco

La Generalitat descarta crear un cuerpo específico de inspectores encargados de velar por el cumplimiento de la Ley Antitabaco que entrará en vigor el próximo 1 de enero, y que prohibirá fumar en los centros de trabajo. "Lo que está claro es que no pondremos un inspector en cada centro de trabajo", declaró ayer la consejera de Salud, Marina Geli.

La consejera recordó que serán los diferentes cuerpos de inspectores ya existentes -los de trabajo, los de prevención de riesgos laborales y los de salud pública- los encargados de garantizar el cumplimiento de la ley. Geli también dijo que la ley catalana de lucha contra el tabaquismo "queda aplazada por el momento".La consejera de Salud, la socialista Marina Geli, anunció ayer que dentro de un año se revisará la aplicación de la ley antitabaco estatal en los bares y restaurantes de Cataluña. El objetivo, dijo la consejera, es garantizar la salud laboral de los empleados que trabajan en la restauración.

A partir del próximo domingo, 1 de enero, el tabaco estará prohibido en los bares y restaurantes de más de 100 metros cuadrados. Únicamente, se permitirá fumar en zonas específicas, que no pueden superar el 30% de la superficie.

Por el contrario, los dueños de los establecimientos de tamaño más reducido podrán escoger si se permite o no fumar. En consecuencia, sus trabajadores tendrán que convivir en una atmósfera de humo, motivo por el cual se convertirán en fumadores pasivos, explicó la consejera. Geli reconoció tener "un sentimiento agridulce" ya que la ley antitabaco no garantiza la salud laboral de este colectivo.

El Departamento de Salud no esconde que entre sus objetivos está el de redactar una ley antitabaco de ámbito autonómico más restrictiva. Pese a las intenciones de la Generalitat, lo cierto es que, de momento, la ley catalana contra el tabaquismo queda en suspenso. "Aplazada a corto plazo", reconoció Geli. De momento, la decisión final está en manos del Consejo Asesor del Tabaquismo. Geli expresó que su deseo es que en el sector de la restauración se considere "un valor añadido" el hecho de que un local sea libre de humo.

Una encuesta encargada por el Departamento de Salud y que se presentará mañana adelanta que esta normativa goza de "un grado de apoyo altísimo" entre la población, "sea fumadora o no", especificó.