El Congreso aprueba definitivamente los Presupuestos Generales del Estado para 2006

El Congreso de los Diputados aprobó ayer definitivamente el proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado para 2006. El vicepresidente del Gobierno y ministro de Economía y Hacienda, Pedro Solbes, se mostró muy satisfecho, y destacó que las cuentas públicas apuestan por la estabilidad presupuestaria y por conseguir un superávit que calificó de "claro" y que cifró en el 0,2% del producto interior bruto (PIB).

La sesión de ayer consistió en el debate y aprobación o rechazo de las enmiendas que se habían introducido en el Senado. No hay votación de conjunto del proyecto donde se expresa el juicio definitivo de cada grupo parlamentario pero, por las distintas declaraciones de los portavoces, puede afirmarse que sólo el PP mantuvo su oposición total a los Presupuestos.

CiU, que presentó enmienda a la totalidad cuando las cuentas públicas llegaron al Congreso, cambió de postura y se abstuvo en la votación del veto que presentó el PP en el Senado. Ayer, su portavoz, Josep Antoni Durán Lleida, dijo que estaba "muy satisfecho" porque gracias a la "actitud positiva" y la voluntad de diálogo del Grupo Socialista ha sido posible que se introdujesen unas 50 enmiendas del grupo nacionalista catalán.

El debate se inició con unas breves intervenciones de los portavoces de cada grupo en este proyecto de ley, algunas de la cuales crearon una cierta confusión, ya que anunciaban el voto favorable o la abstención, o el cambio de voto respecto a tramites anteriores.

Tuvo que ser el portavoz de CiU, Jordi Vilajoana, el que mostrara su extrañeza y aclarara que estaba escuchando a algunos portavoces afirmar que votarían "a favor de este Presupuesto", pero señaló: "Hoy no vamos a votar ni a favor ni en contra, sino que lo que estamos haciendo en esta sesión es aprobar o rechazar las enmiendas que se aprobaron el Senado".

Al margen de imprecisiones reglamentarias, Fátima Báñez, en nombre del PP, expresó su oposición rotunda al proyecto, pidió el apoyo para las numerosas enmiendas (más 100 de unas 400) que llegaban del Senado, la mayoría de las cuales habían sido introducidas por su grupo, y explicó que esto ocurría porque se trata de unos "Presupuestos facilones, electoralistas y que no se han hecho con un objetivo claro de política económica".

Pedro Saura, portavoz socialista, agradeció "el apoyo de todos los grupos, excepto del Partido Popular, a estos Presupuestos", y aclaró el voto negativo a las enmiendas populares del Senado, justificándolo de este modo: "El PP lo que quiere es saltar los dos ojos al Gobierno aunque él pierda uno". "El PP, en el Senado, presentó enmiendas por valor de 12.000 millones de euros; para entendernos, dos billones de pesetas. Pero lo peor no es eso", prosiguió Saura, sino que, dijo, "las enmiendas del PP suponen un descuadre, un incremento del techo de gasto, un agujero de 1.100 millones de euros".

Las propuestas del PP, según aseguró, eliminaban el llamado fondo de contingencia, lo que, dijo Saura, supondría no poder pagar cualquier desastre natural que pueda producirse en 2006. El diputado socialista acusó a los populares de ser capaces de "ir contra sus propias leyes de estabilidad presupuestaria".

El presidente del Congreso cerró el último Pleno de este periodo de sesiones con buen humor: "Señoras y señores diputados: no me ha tocado la lotería, feliz Navidad y hasta el año que viene". Las sesiones ordinarias se reanudarán en febrero, según establece la Constitución.