El PP se suma al consenso sobre la nueva Ley de Tropa
Los soldados podrán seguir en filas hasta los 45 años, y 1.500 despedidos podrán regresar
El portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Eduardo Zaplana, anunció ayer "un acuerdo cerrado" con el Ministerio de Defensa sobre la Ley de Tropa y Marinería, que pretende hacer sostenible el modelo de Ejército profesional. El cambio de actitud del PP, que el 29 de septiembre defendió una enmienda a la totalidad de la ley, permitirá que el proyecto se apruebe la semana próxima en el Congreso y quede listo para su ratificación por el Senado en febrero.
Zaplana aseguró que el pacto, que incluye la incorporación de un conjunto de enmiendas al proyecto, prueba que los populares están "siempre predispuestos a llegar a acuerdos y son otros los que quieren excluirnos". En la negociación han participado a lo largo de las últimas semanas los diputados del PP Asunción Oltra y Héctor Esteve, así como el secretario de Estado de Defensa, Francisco Pardo, y el portavoz socialista Jesús Cuadrado, además de Zaplana y el ministro José Bono.
El PP ya llegó a un pacto con Bono sobre el proyecto de Ley de Defensa Nacional en mayo pasado, pero el acuerdo se rompió supuestamente por una discrepancia sobre conjunciones -la adversativa "o" frente a la copulativa "y"- en el artículo referido a los requisitos para enviar tropas al exterior. "Espero no tener ahora ningún tipo de sorpresa", dijo ayer Zaplana.
Cuadrado se felicitó de que exista un "consenso generalizado" sobre la Ley de Tropa, ya que, antes de cerrarlo con el PP, se alcanzó un acuerdo con los demás grupos. También Bono se mostró "muy satisfecho" de lo que consideró una "buena noticia".
Entre las reformas que sufrirá la ley destaca la elevación a 45 años de la edad hasta la que pueden seguir en activo los soldados que firmen un compromiso de larga duración. Varios grupos habían pedido que se elevara el límite de los 42 años que marcaba el proyecto a los 45, para poder beneficiarse de los incentivos legales a la contratación de mayores de dicha edad. La gran novedad de la ley es ese contrato de larga duración, que permitirá pasar a la reserva con una pensión anual de 7.200 euros compatible con un sueldo privado.
Otra de las enmiendas pactadas con los grupos permitirá regresar a los oficiales de complemento que perdieron su empleo a partir del 31 de diciembre de 2003 por haber superado los 38 años de edad o los 12 de servicio. Dichos militares podrán reincorporarse a filas por un máximo de tres años, mientras se aprueba la nueva ley que reformará la carrera militar y sus diferentes escalas.
El proyecto remitido por el Gobierno ya preveía la readmisión de los soldados despedidos por haber cumplido 35 años de edad o 12 de servicio, quienes podrán seguir en los ejércitos hasta que cumplan la edad de 45.
El problema es que la ley no entrará en vigor antes de marzo de 2006 y mientras tanto seguirán produciéndose despidos con arreglo a la legislación que se va a reformar. Los soldados que han perdido su empleo en estos dos años suman 1.291 y los oficiales 217, según datos de Defensa, que cree que menos de la mitad pedirá la readmisión. La intención es que recuperen sus antiguos destinos, pero sólo si hay vacantes.
La solución a los problemas de los oficiales de las Escalas Auxiliares y Cuerpo Auxiliar de Especialistas del Ejército y de los Cabos Primeros Veteranos de la Armada también se remite a la futura ley de la carrera militar.
Otra enmienda eleva de 25 a 27 años la edad máxima para hacerse soldado o marinero, y otra suprime la cifra del contingente total de efectivos, entre 80.000 y 90.000, que deja a los Presupuestos de cada año. La ley actual lo sitúa entre 102.000 y 120.000, pero en realidad sólo hay 73.000.
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