Mas insiste en que el término nación figure en "algún punto" del Estatuto

El líder de Convergència i Unió, Artur Mas, acudió ayer de nuevo a Madrid para explicar los contenidos de la propuesta de Estatuto de Cataluña ante un foro de empresarios, donde insistió en que "el término nación catalana debe figurar en algún punto del Estatuto" porque si no pedirá la retirada del texto. "Cataluña siente que es una nación, hay que encontrar una fórmula para decirlo. En el 78 no fue posible porque había ruido de sables. Pero han pasado 25 años, es el momento de dar un paso adelante", explicó para añadir que la "cosoberanía" es algo que ya se aplica en la UE, donde los países comparten algunas políticas.

Mas volvió a lanzar su oferta al PSOE para ofrecer un apoyo estable en lugar de ERC, pero recordó que esta propuesta no es realizable hasta que haya elecciones catalanas porque el tripartito (PSC, ERC e ICV) gobierna en Cataluña y en el resto del país. "Que todo el mundo se coma el turrón tranquilo. Que no haya celos", aseguró en clara referencia a ERC.

El líder de la oposición en Cataluña, sin apenas poder en las instituciones pero con una fuerza de presión notable en la negociación del Estatuto, trató de presentarse ante el empresariado que seguía sus palabras en el Foro ABC como factor de estabilidad frente a un Gobierno, el catalán, "que no contribuye a generar la tranquilidad política" necesaria en este momento.

Mas criticó con dureza al PP, que en su opinión está abriendo "heridas difíciles de cicatrizar". "Para sacar algunos votos se puede cargar el clima de convivencia entre todos, y eso sí que es peligroso. Está aprovechando comunicados de ETA para atacar el Estatuto. Entonces, ¿ETA también tiene razón cuando dice que en el País Vasco hay una invasión? Nosotros creemos que no se le puede dar la razón en ningún caso", explicó.

Respecto a la financiación, que denominó "el grano" del Estatuto, frente a la "paja", que sería la parte de derechos civiles, Mas aseguró que no pretenden acabar con la solidaridad, sino "recomponer las normas para que sea objetiva y estimulante, para que no nos instalemos en la cultura del subsidio o la prebenda". "Esto no es romper España, esto es cambiarla", insistió.