La Caixa ha informado al Banco de España sobre su crédito al PSC cada mes desde 1994
La caja, que ha elevado al consejo el perdón parcial de la deuda, ha cobrado 300.000 euros
El Banco de España "dispone de toda la información" sobre la deuda que el Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC) arrastra desde 1986 con La Caixa, aseguran fuentes de la entidad financiera, que comunica "cada mes y de forma automática" las variaciones de sus créditos a la Central de Información de Riesgos del supervisor. Este registro refleja que en diciembre de 2004 la deuda del PSC bajó casi a la mitad, hasta 7,81 millones de euros, y que el PSC empezó a pagar su deuda en 2005. El Banco de España no confirma ni desmiente esta información porque "no es pública".
Pese a todo, y en plena bronca política agitada por el PP, el gobernador Jaime Caruana ha apuntado que investiga el perdón de intereses al PSC.
La deuda del PSC con La Caixa es antigua, conocida e hizo correr ríos de tinta en los años noventa. Se remonta a 1986 y, según el PSC, se explica por los gastos de la campaña de la OTAN. El PSC había suscrito dos pólizas: una, de 2,54 millones de euros, con la Caja de Barcelona, y otra, de 5,50 millones, con la antigua Caixa. Cuando ambas entidades se fusionaron, La Caixa se cubrió las espaldas y provisionó la deuda en 1990.
Durante los siguientes cuatro años, la caja ocultó al Banco de España la evolución del doble crédito, hasta que, en 1994, EL PAÍS desveló esta irregularidad. La Caixa debía continuar enviando información al supervisor al no haber declarado el crédito "fallido", lo cual implicaba que tenía esperanzas de cobrarlo. Fuentes de la entidad aseguran que, desde "aquel error", ha informado cada mes. También admite que la comunicación de datos es un mecanismo automático: si la cuantía adeudada disminuye, no se distingue si baja porque el deudor ha pagado o si se le ha perdonado parte del dinero.
Tras la publicación por El Mundo de la condonación parcial de la deuda, la cúpula actual del PSC, empezando por su primer secretario, José Montilla, ha reiterado que La Caixa no le reclamó el pago durante años. La entidad que preside Ricard Fornesa confirma que no presentó ninguna reclamación judicial, pero rechaza que se haya desentendido de una deuda que, con intereses, escaló a 14,3 millones.
Fuentes de la caja aseguran que, al margen de numerosos contactos telefónicos, se han celebrado al menos dos reuniones anuales con representantes del PSC, encuentros que dirigentes del PSC de aquella época confirman. Por el PSC, el interlocutor era su ex responsable de finanzas Joaquim Llach. Por La Caixa, era el responsable de la dirección de Riesgo y Recursos, Jesús Escolano. En estas reuniones no participó Montilla, corroboran La Caixa y el PSC. El ahora ministro de Industria fue, entre 1994 y 2000, secretario de Organización del partido. Sí admite que "evidentemente" conocía la deuda y también el resultado de su renegociación, en el año 2004.
"Se examinaron las posibilidades de recuperar el dinero, pero se estimó oportuno continuar la vía de la negociación. Es difícil embargar a un partido. ¿Qué se embarga? ¿Las siglas?", reflexiona un directivo de la caja. Algún patrimonio tiene el PSC. Su dirección afirma que la sede del partido, en la calle de Nicaragua de Barcelona, con cinco plantas y dos sótanos, es de su propiedad. En las reuniones, los socialistas catalanes reiteraban siempre que no podían pagar. Confiaban en un cambio de la ley de financiación de partidos, que data de 1987, y también en beneficiarse de una eventual recuperación del patrimonio histórico del PSOE.
Todo cambió con la última tanda de elecciones de 2004, y no por la oferta pública de adquisición (OPA) por parte de Gas Natural, participada por La Caixa, sobre Endesa, lanzada el 5 de septiembre de 2005, sostiene la caja, aunque es cierto que la eléctrica llevaba en su punto de mira muchos meses. Los fondos públicos para los partidos se reparten de acuerdo con los votos y los representantes obtenidos. A título de ejemplo, en las generales de 2004, el PSC incrementó un 36% su resultado sobre el obtenido en 2000. Pese a todo, explica La Caixa, "nunca aceptó que pudiera pagar toda la deuda".
Un modesto interés
La recta final de la negociación se desarrolló entre el verano y la Navidad de 2004. El PSC buscaba, Código Civil en mano, no tener que pagar los intereses acumulados acogiéndose a que, a los cinco años, prescribía su reclamación. Logró así el perdón de 6.574.002,85 euros. El resto, 7.813.157,36 euros, se podrá pagar en un plazo de 15 años, con un muy modesto interés del 3%.
Fuentes de la caja califican este pacto de "algo generoso", pero también de "nada raro" en la negociación de créditos impagados con entidades y empresas. "Era la única posibilidad de cobrar algo", añaden. El pacto de la renegociación lo firmó José Zaragoza, secretario de Organización y finanzas del PSC desde julio de 2004.
Con conocimiento previo de la dirección general de La Caixa, el acuerdo fue aprobado el 29 de diciembre de 2004 por la comisión de seguimiento de riesgos y el comité de créditos de la entidad financiera, que según ésta es "soberana" para dar luz verde a las renegociaciones. La condonación de intereses no pasó entonces por el consejo de administración, que sí autoriza obligadamente todos los créditos a partidos, pero no las renegociaciones. El consejo sí lo hizo, en una decisión unánime, el pasado 24 de noviembre, a raíz de la bronca política. La caja no ha dejado pasar la ocasión de recordar su baja ratio de morosidad (0,41% en el caso del grupo y 0,34% en la entidad, en 2004).
Este año, el PSC ha empezado a pagar. La Caixa dice que ya ha cobrado cerca de 300.000 euros. "Va despacio, pero lo importante es que el partido vaya pagando cómodamente. ¿De qué nos servirían condiciones más draconianas si al poco no pudiéramos volver a cobrar?", indican fuentes de la entidad.
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