Lasa dice que ETA está "viva" y pide que se le derrote y deslegitime

La directora de Víctimas del Terrorismo, Maixabel Lasa, mostró ayer a los componentes de la Ponencia de Víctimas su satisfacción por la clarificación sobre las funciones de ese órgano y dijo que la ausencia de EHAK será "agradecida" por los afectados por el terrorismo cuando tengan que acudir a ella.

Lasa no quiso entrar a valorar las expectativas sobre el fin de la violencia y subrayó que, "hoy por hoy, ETA sigue siendo una banda terrorista viva y operativa, a la que hay que derrotar deteniendo comandos y deslegitimando su proyecto criminal. Ni más, ni menos", recalcó. La directora de Víctimas dijo que no es aún momento de hablar de generosidad o perdón para los asesinos. "Mucho menos de reconciliación", agregó.

Maixabel Lasa fue tajante al afirmar que lo que "toca" ahora es hablar del reconocimiento. Algo que las víctimas de ETA no han tenido aún, señaló, porque, "la teoría del conflicto político como coartada del crimen" ha actuado "como un somnífero en la conciencia moral de la sociedad vasca".Lasa admitió que se han producido algunos cambios en la percepción social e institucional de ese "déficit" de reconocimiento a las víctimas, que se han traducido en algunas iniciativas y homenajes. Pero han sido "pocos y aislados", dijo, en contraste con los "cientos" de pronunciamientos en favor de los presos o contra detenciones policiales. "Las víctimas del terrorismo tienen derecho a que se inviertan los términos de esta situación completamente anómala", reclamó.

Maixabel Lasa señaló como "hoja de ruta" para el trabajo de la nueva ponencia los acuerdos alcanzados en ella en junio de 2003 y los aprobados por el pleno de la Cámara en febrero de este año. Esos acuerdos están sin cumplirse en su práctica totalidad y la directora de Víctimas, que enumeró lo realizado y lo pendiente, dijo que en el compromiso con ellos se juegan las instituciones vascas "su complexión moral".

Lasa pidió también ayuda "y mayor implicación", tanto a la ponencia como tal, como a los partidos, para tratar de persuadir a los ayuntamientos de celebrar homenajes a sus víctimas, algo que, a su juicio, "dignificaría" a los municipios. La misma claridad usó para reclamar "la presencia de las víctimas del terrorismo en los centros escolares", como parte de un programa de educación para la paz que, a su juicio, no puede ser sólo genérica, porque resultaría "vacía". Lasa llamó a superar la abstracción y a descender a explicar en las escuelas lo que ETA ha hecho.

La directora de Víctimas se mostró partidaria de que la Ley de Solidaridad con las víctimas, prevista en el acuerdo de febrero de este año, sea promovida por el propio Parlamento y no por el Gobierno. Y propuso que sea la ponencia, contando con los afectados, la que elabore el texto. A su juicio, la aprobación por unanimidad en el Congreso de la ley de Solidaridad, en 1999, supuso "un antes y un después". El Parlamento vasco debe ahora hacer lo propio "para hacer visible y reconocible" su compromiso.

Lasa concluyó su intervención recordando que ayer se cumplieron 27 años del asesinato del guardia civil Manuel León Ortega, mientras tomaba un café en un club deportivo de Oñati. "Tenía 35 años, estaba casado y era padre de tres hijos", expuso.

Lasa tuvo también interés en resaltar que la ponencia "seguirá siendo la Ponencia de las Víctimas del Terrorismo" y que "absolutamente todas" sus tareas se refieren a las necesidades de los afectados, tanto se trate del "terrorismo etarra como el auspiciado por el Estado".