Onaindi y Casado acusan al Ejecutivo de plegarse al "chantaje" de ELA

Los sindicatos CCOO y UGT de Euskadi arremetieron ayer contra el Ejecutivo, y en particular su consejero de Empleo, Joseba Azkarraga, por su renuncia a impulsar el diálogo social de forma conjunta entre todas las centrales y la patronal. Azkarraga reconoció el martes en el Parlamento que no existen "condiciones objetivas" para sentar en una misma mesa a todos los agentes sociales por la oposición frontal de ELA, la principal central vasca.

Los dos máximos responsables de las centrales de ámbito nacional en Euskadi (Josu Onaindi, de CCOO, y Dámaso Casado, de UGT) fueron los portavoces, en sendos comunicados, del serio malestar de sus organizaciones con el titular de Empleo y, por ende, con el sindicato nacionalista.

Onaindi culpó al Gobierno de "aceptar" y no ocultar "el chantaje y secuestro al que le somete" ELA, de forma que los "intereses reales" de los trabajadores son "postergados por otro tipo de intereses", con su renuncia al diálogo social.

El responsable de CCOO en la comunidad autónoma, para quien las declaraciones de Azkarraga sólo han venido a confirmar lo que su central venía diciendo desde hace tiempo, volvió a exigir al lehendakari, Juan José Ibarretxe, que asuma su responsabilidad, pues su "falta de liderazgo está propiciando estas situaciones".

Casado acusó al consejero de "supeditarse de nuevo a la estrategia excluyente, corporativa y privatizadora de las relaciones institucionales que viene practicando ELA".

Para el secretario general de UGT-Euskadi, con su decisión, Azkarraga "ignora el pluralismo sindical de la sociedad vasca y acepta sin más el bloqueo y veto de una mayoría minoritaria, nos sitúa en el 'absentismo institucional' y traslada el bloqueo de las instituciones sociolaborales al conjunto de la sociedad".

UGT también insta el Ejecutivo autónomo en su conjunto a ser quien lidere el "necesario" diálogo social en Euskadi.