"No soy ningún capo, mafioso o terrorista"
El edil del PA en Marbella Carlos Fernández alegó ayer que "nunca robó ni quitó nada a los ciudadanos" de la localidad, en el último día del juicio por malversación de caudales públicos, que ayer quedó pendiente del veredicto del jurado. "No soy ningún capo, mafioso de la droga o terrorista. Sólo era un recién llegado y no entendía nada de fútbol, por lo que no pude negociar contrato falso alguno", añadió Fernández, quien ha sido procesado junto al ex entrenador de la Unión Deportiva San Pedro, Ramón Heredia, y un empleado municipal, Antonio de Sola. El fiscal considera que Fernández se quedó en 1997 con parte del dinero de unas subvenciones para el equipo cuando era edil de Deportes.
Fernández aludió a que en 1997 no estaba al corriente de los contratos fraudulentos que salieron a la luz en una reunión con toda la plantilla del San Pedro y el entonces alcalde Jesús Gil: "No sabía que iba a esa reunión. Me quedé en estado de shock y a continuación prepararon mi carta de dimisión", explicó. Por su parte, el empleado Antonio de Sola alegó que no manejaba dinero alguno para los deportistas: "Soy un convidado de piedra en esta historia", se excusó.
La Fiscalía, que mantiene para Carlos Fernández y Antonio de Sola su petición inicial de cuatro años de prisión y ocho de inhabilitación, afirmó ayer durante su informe que ambos eran "los únicos que manejaban dinero en efectivo", y por tanto, "los únicos que podían apropiarse del mismo". Mientras, consideró que el ex entrenador Ramón Heredia, a quien rebajó la petición a dos años de prisión y cuatro de inhabilitación, "no tenía facultad para pagar a los jugadores", por lo que su papel se limitó a negociar los contratos con seis de ellos. El fiscal recalcó que el funcionamiento del club de fútbol era "presidencialista", y que como había reconocido el propio Fernández, el edil tenía "la última decisión como presidente".
