La plantilla de 'Libération' y Rothschild llegan a un acuerdo

El diario francés Libération ha vuelto a la calle tras cuatro días sin acudir a la cita con sus lectores. La plantilla del periódico fundado por Jean Paul Sartre en 1973 y recientemente adquirido por el financiero Eduard de Rothschild votó casi por unanimidad volver al trabajo y suspender la huelga emprendida el pasado día 21 en protesta contra el plan de reestructuración que pretendía imponer la empresa, consistente en la reducción de 52 puestos de trabajo sobre una plantilla de 334. La dirección del periódico ha limitado a 26 los puestos de trabajo a suprimir y se compromete a tramitar el resto como salidas voluntarias con una indemnización de 40.000 euros.

Rothschild se convirtió en el principal accionista de Libération el pasado mes de abril cuando se hizo con el 38,87% del capital invirtiendo 20 millones de euros en un momento en que el rotativo que dirige Serge July tenía graves problemas de tesorería. La sociedad del personal del periódico (SCPL) controla un 18,45% del capital. La entrada de una figura tan emblemática del capitalismo en el periódico que más legítimamente puede reclamarse como hijo del mayo de 1968 fue una sorpresa, pero Rothschild ofreció todo tipo de garantías sobre la independencia de la línea editorial del periódico y prometió que mantendría la plantilla.

Nuevos dirigentes

Seis meses después, y tras haber colocado a cinco nuevos miembros en el consejo de Administración, Rothschild ha decidido entrar finalmente en la gestión económica de una empresa que sigue teniendo grandes pérdidas. El cálculo de pérdidas para el ejercicio de 2005 es de 8 millones de euros, el doble que en el año 2004. El plan anunciado el lunes pretende conseguir un ahorro anual de en torno a los cuatro millones de euros y alcanzar beneficios en 2007. En los últimos dos años la difusión de Libération ha caído en un 9,8%, situándose en torno a los 135.000 ejemplares. Los ingresos por publicidad han sufrido una reducción del 10%.