El Gobierno exige al PP que pida perdón a Cataluña por llamar a la banda tutora del Estatuto
El Ejecutivo y el PSOE replican con firmeza a la campaña del primer partido de la oposición
El ministro de Industria y primer secretario del PSC, José Montilla, instó ayer a Mariano Rajoy y Ángel Acebes, presidente y secretario general del PP, respectivamente, a "pedir perdón a los ciudadanos de Cataluña" por haber afirmado que ETA es la tutora de la reforma del Estatuto catalán, e hizo un llamamiento a los partidos catalanes para "derrotar la estrategia de crispación" del PP. La vicepresidenta primera, María Teresa Fernández de la Vega y el secretario de Organización del PSOE, José Blanco, aprovecharon varios actos públicos para reprochar al PP su comportamiento "desleal y antipatriótico" y emplazarle a que rectifique y deje de "utilizar la lucha contra el terrorismo como un elemento de confrontación".
Fernández de la Vega respondió con contundencia a las acusaciones del secretario general del PP, Ángel Acebes, de que el Gobierno "ha pagado el precio político" puesto por ETA para declarar una tregua a cambio de que Cataluña y País Vasco sean naciones. Recordó al PP que en la lucha contra el terrorismo "todo Gobierno, sea del signo que sea, merece todo el apoyo. En esto no caben medias tintas". Y sentenció: "Utilizar la lucha contra el terrorismo como elemento de confrontación y desgaste es desleal y antipatriótico".
La vicepresidenta aseguró que la lucha contra el terrorismo requiere de la cooperación internacional ya que "sólo es eficaz cuando se aborda desde la actuación conjunta policial y judicial, desde la cooperación internacional y desde la unidad de los demócratas".
El ministro de Industria, José Montilla, aseguró que no se dejará amedrentar ni por el PP ni por "su entorno mediático" y además quiere que el Gobierno continúe su proyecto de "reformismo social" sin temor a las presiones de la derecha.
Montilla explicó que "el PP ha perdido los papeles mediante la infamia, la calumnia, el odio y la insidia con su forma de hacer política". El ministró opinó que el lenguaje del PP "pone en tela de juicio el Estado de Derecho", como lo hizo el viernes "la Asociación de Víctimas del Terrorismo pidiendo que España se retire de la ONU y de la UE".
Tanto Montilla como el presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, señalaron que "no hay que dejarse intimidar" por las campañas que el PP ha lanzado contra el Estatuto. El ministro reclamó a los políticos socialistas en una reunión del PSC que trabajen "sin complejos" por un doble objetivo: no permitir que el PP les fuerce a "salirse del guión" y "explicar a la ciudadanía la acción de gobierno". Asimismo, explicó: "La derecha nos ataca con este grado de dureza, porque estamos impulsando reformas que afectan a su poder económico". También manifestó que el Ejecutivo tiene "voluntad de diálogo" y quiere conseguir grandes acuerdos, también con el PP, "si es posible". Pero advirtió: "No nos arrugaremos ante la intransigencia de los que no quieren negociar nada sino y buscan sólo erosionar al Gobierno".
Montilla señaló que el PP "está preocupado", porque "se ha dado cuenta de la profundidad y trascendencia del proyecto de transformación de Cataluña y de España, que encabezan los socialistas". A su juicio, las reformas de rango constitucional tendrán que esperar a que en el PP se produzca un cambio, que no llegará hasta finales de 2008, "cuando Rajoy pierda de nuevo las elecciones", dijo.
Maragall defendió con vehemencia a Montilla, al que puso como ejemplo a seguir por su "firmeza" y "serenidad", y también a Zapatero, por las reformas que ha emprendido. El presidente catalán aseguró que "la derecha está angustiada por su propia supervivencia".
El secretario de Organización del PSOE, José Blanco, manifestó en Segovia, en alusión a la carta de ETA, que "el PP utiliza todos los medios para atacar al Gobierno", cuando sólo caben dos estrategias: "Una, que es la de combatirla desde la unidad de los demócratas, como lo hace el Gobierno todos los días; la otra, la que ejercita el PP, que prefiere romper la unidad y convertirse en altavoz de ETA, como lo ha hecho con las declaraciones de Acebes", informa Aurelio Martín. Blanco añadió que la actitud del PP "es una irresponsabilidad de este partido y de quien fue ministro del Interior, porque, por atacar al Gobierno, dan a los terroristas un protagonismo que no tienen". Blanco, achacó al PP haber abandonado el centro político, para situar su discurso próximo al de un partido ultra, "de pensamiento neoconservador, de derecha extrema radical, rancia, antigua, casposa, autoritaria y antisocial".
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