El túnel de Vielha no podrá estar acabado en marzo como se preveía

El subdelegado del Gobierno central en Lleida, José Ángel Flores, admitió ayer que el nuevo túnel de Vielha, que actualmente se está construyendo en la carretera N-230, principal vía de acceso a la Val d'Aran, no podrá entrar en servicio el próximo mes de marzo como estaba previsto, debido a que las obras llevan un retraso considerable. Flores evitó fijar una nueva fecha para la inauguración de la galería.

El pasado 2 de marzo, tres años después de la colocación de la primera piedra, finalizaron las obras de perforación de la galería, que tendrá una longitud de 5.230 metros y será, en opinión de los técnicos, una de los más seguras de Europa para los automovilistas. El ritmo de los trabajos se ha visto alterado desde el pasado mes de abril, cuando las constructoras reclamaron al Ministerio de Fomento que les autorizara la suspensión temporal de las obras por no estar tramitado ni aprobado el proyecto técnico modificado del nuevo paso subterráneo. La petición, justificada por motivos de seguridad, coincidió con los hundimientos ocurridos en el barrio del Carmel. Desde entonces, Fomento no se ha pronunciado sobre esta cuestión.

Las modificaciones solicitadas, que supondrán un aumento considerable del presupuesto, afectan a diversas partes de la infraestructura, en especial a los trabajos de revestimiento del interior del túnel, a las galerías de servicios y a la colocación de las instalaciones eléctricas, ventilación, iluminación, telefonía y videocámaras. En estos momentos, los pocos operarios que quedan no pueden trabajar en el interior sin el proyecto original modificado y dentro de poco tampoco podrán hacerlo en el exterior por la nieve.

El contrato firmado entre Fomento y las empresas adjudicatarias de las obras establece que el nuevo túnel debe estar acabado el 8 de febrero de 2006, algo que difícilmente podrá cumplirse. Flores señaló que las constructoras han solicitado 90 trabajadores extranjeros especializados en la construcción de túneles.

Carles Barrera, síndico de Aran y máxima autoridad política en el valle, ha enviado una carta a la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, en la que le exige que informe por escrito al Conselh Generau sobre el estado de las obras.