La juez envía a prisión a los dos fundadores de los 'Black Lions'

El Juzgado de Instrucción número 2 de Torrevieja decretó ayer prisión provisional para los dos máximos responsables de la banda callejera Black Lions. Un tercero podrá eludir la cárcel previa fianza de 3.000 euros. El resto de los 17 detenidos por su supuesta pertenencia quedaron libres con cargos. A todos se les imputa los delitos de asociación ilícita, amenazas, coacciones y malos tratos a menores.

Los 17 presuntos integrantes de la banda callejera los Black Lions [que participaron en actos violentos en colegios y parques y escogían a menores para coaccionarles y extorsionarles], prestaron declaración ante la juez el sábado, aunque la magistrada pospuso la resolución judicial hasta a ayer. A instancias del fiscal, la titular del Juzgado de Instrucción número 2, ordenó el ingreso en prisión para los dos fundadores y máximos cabecillas de esta organización juvenil, integrada mayoritariamente por ecuatorianos. La juez también decretó cárcel para un tercero, si bien en este caso el incriminado eludirá la prisión previo pago de una fianza de 3.000 euros.

El resto de los encausados, una chica y un español entre los 14 implicados, quedaron en libertad con cargos. Estos deben personarse en las dependencias judiciales todas las semanas. La juez les requisó el pasaporte y les advirtió de que su situación legal puede modificarse en el supuesto de que se les relacione con cualquier otro acto delictivo.

Fuentes judiciales explicaron ayer que la diferente aplicación de la ley a cada uno de los incriminados se justifica por el distinto grado de responsabilidad de los encausados dentro de la organización delictiva.

A la acusación inicial de los agentes [la Guardia Civil les imputó los delitos de asociación ilícita, amenazas y coacciones] la juez añadió el de malos tratos a menores.

De hecho, las denuncias de madres de escolares del Instituto de Enseñanza Secundaria (IES) Mare Nostrum de Torrevieja sobre supuestos episodios de acoso sufridos por sus hijos a cargo de algunos de los imputados fue lo que puso en la pista a la Guardia Civil. Tras una investigación y cuatro registros domiciliarios el pasado miércoles, la operación policial se saldó con 17 arrestados, entre ellos un menor. Se trata del segundo dispositivo que la Guardia Civil despliega en Torrevieja, en menos de dos meses, contra el vandalismo juvenil.

El pasado septiembre, agentes de este cuerpo desmantelaron otra banda violenta de pandilleros de origen suramericano, conocida como Latin King. Entonces, un total de 18 personas fue detenida por su supuesta pertenencia a la red. La operación supuso la neutralización de esta tribu callejera, pero a su vez derivó en el germen de una segunda organización de similares tintes, los Black Lions. Los integrantes de ambas bandas, enfrentadas por el control territorial del municipio, medían su superioridad a través de actos vandálicos muy violentos, según informó la Comandancia. Ambas bandas tienen una organización muy rígida y piramidal. Sus miembros realizan pruebas de acceso, pagan cuotas periódicas y reciben castigos físicos si incumplen las consignas.

En la operación para desarticular a los Black Lions, los agentes, finalmente, sólo pusieron a disposición judicial a 17 personas. No obstante, la Guardia Civil calcula que esta banda callejera está integrada por al menos 40 miembros, entre ellos menores. La mayoría, de origen latinoamericano, coaccionaban con métodos muy violentos a otros muchachos dentro y fuera del colegio.