Más fichajes para la liga de los multimillonarios chinos

Lujosas limusinas, tiendas deslumbrantes de las mejores marcas mundiales, hoteles de cinco estrellas que no dan abasto. En un país como China, en el que no hace mucho tiempo el culto al dinero y la más mínima inclinación capitalista podían tener nefastas consecuencias, hoy ser rico es glorioso. Y los ricos cada vez lo son más.

Así lo ponen de manifiesto sendas listas de las personas más acaudaladas de la potencia asiática, que acaban de publicar la revista Forbes y el investigador Rupert Hoogewerf, presidente de Euromoney China. Según Forbes, el número de milmillonarios en dólares ha pasado de 3 a 10 en sólo un año, y la riqueza conjunta acumulada por los 100 ciudadanos más pudientes ha subido de 29.000 millones de dólares (24.550 millones de euros) a 41.000 millones (34.709).

"El rápido crecimiento económico y un inmenso apetito extranjero por las inversiones chinas han ayudado a impulsar la fortuna de los más ricos en los últimos 12 meses", asegura Forbes, que sitúa en cabeza por segundo año consecutivo a Rong Zhijian, con un capital cifrado en 1.644 millones de dólares (1.391,7 millones de euros).

Rong, de 63 años, también conocido como Larry Yung, es presidente y uno de los mayores accionistas de Citic Pacific, la división en Hong Kong de la principal compañía de inversiones estatal china, fundada a finales de los años setenta por su padre, Rong Yiren, por órdenes de Deng Xiaoping (el arquitecto de la reforma económica china). Rong Yiren, que falleció el 26 de octubre a los 89 años de edad, fue vicepresidente de China y en 2000 fue declarado el hombre más rico del país por Forbes.

Tras su hijo figura este año el promotor inmobiliario Zhu Mengyi y su familia, con una fortuna de 1.430 millones de dólares (1.210,6 millones de euros), seguido de Ding Lei, fundador de la empresa de Internet Netease.com, que cotiza en el Nasdaq. Lei aparece con unos bienes estimados en 1.267 millones de dólares (1.072,6), casi el doble que el año pasado, gracias a la recuperación del precio de las acciones de la compañía.

"Los ricos chinos son cada vez más ricos. En los últimos años, el mercado se ha expandido y muchos negocios han duplicado y duplicado los ingresos", explica Hoogewerf desde Shanghai, donde tiene la sede su empresa. Según este londinense, que antes elaboraba la lista de Forbes y ahora compite con ella, hay ricos que no figuran en la lista por un simple motivo: "No hemos podido encontrarlos".

Hoogewerf asegura que a la mayor parte de la gente no le gusta hacer pública su riqueza, especialmente en Asia. Varios magnates fueron encarcelados después de que el anterior primer ministro, Zhu Rongji, lanzara el fisco en pos de sus huellas tras la publicación de la lista Forbes de 2001. Algunos acabaron tras las rejas. No obstante, aunque muchos evitan los focos, temerosos de Hacienda y de las envidias, el consultor británico afirma que "los empresarios son ahora más maduros y tienen más confianza, lo que hace que exista más transparencia que hace unos años".

La dificultad de evaluar las fortunas de estos directivos, cuyas compañías en algunos casos no cotizan, explica que ambas listas no coincidan. El informe de Hoogewerf lo encabeza por segundo año Huang Guangyu -36 años y cuarto en la lista de Forbes-, con una fortuna de 1.700 millones de dólares (1.439,2 millones de euros). Esta cantidad supone un 30% más que el año anterior. Huang es propietario de Gome, la mayor cadena de electrodomésticos del gigante asiático.

Le sigue en la lista de Hoogewerf, con 1.500 millones de dólares (1.269,8 millones de euros), Yan Jiehe, de 45 años, presidente de China Pacific Construction. Yan ha hecho fortuna gracias a los contratos millonarios para construir autopistas otorgados por los Gobiernos locales. Dirige el grupo privado con más empleados del país: 100.000. Hoogewerf sitúa a Rong Zhijian en sexto lugar, con 1.100 millones (931,2 millones de euros).

Según esta clasificación, la fortuna media de los 100 ciudadanos más ricos ha crecido un 48% en un año, hasta 440 millones de dólares (372,5 millones de euros). Para formar parte de esta élite es necesario contar ahora con un capital de 210 millones, frente a los 150 millones del año pasado, y los tan sólo 6 millones de 1999, cuando apareció la primera lista. Se estima que un 20% de estos millonarios son miembros del Partido Comunista Chino, algunos de ellos diputados.

El fuerte ritmo de aparición de nuevos millonarios se da en una sociedad en la que la brecha entre ricos y pobres cada vez es mayor. Hasta tal punto que el propio Gobierno ha hecho sonar las alarmas y está tomando medidas, ya que las crecientes desigualdades son fuente de inestabilidad.