Los nacionalistas advierten de que el escollo del Estatuto será la financiación

Los partidos catalanes, principalmente ERC y CiU, advirtieron ayer, sólo unas horas después de terminado el debate en el que se aprobó la tramitación del Estatuto catalán en el Congreso, de que los recortes anunciados por el presidente José Luis Rodríguez Zapatero pueden dar al traste con cualquier posibilidad de acuerdo. Artur Mas (CiU) y Joan Puigcercós (ERC) anunciaron que no aceptarán la "desnaturalización" del proyecto ni en el capítulo de la financiación ni en la definición de Cataluña como nación.

El Gobierno catalán, que integran el PSC, ERC e ICV, y los nacionalistas de CiU coincidieron en que no van a admitir cambios sustanciales en los aspectos básicos del proyecto, y en particular en el de la financiación.

Dos de los cuatro partidos que apoyan la reforma, CiU y ERC, señalaron ayer que negociación no debe ser sinónimo de recorte. Mas y Puigcercós situaron en el centro del debate el modelo de financiación para Cataluña que el Estatuto propone. "Si esta parte no sale bien, no podremos decir que el Estatuto sale bien", advirtió Mas. "No debe haber desnaturalización del proyecto" de financiación, dijo Puigcercós, "porque es el núcleo central".

Mas puntualizó que la propuesta catalana "no pretende que el Estado renuncie a sus impuestos, cuya titularidad CiU no discute". Pero otra cosa es la gestión: "Ahí sí que no estamos dispuestos a sacrificar nuestra capacidad de intervención", añadió. Los portavoces de los socialistas catalanes prefirieron recordar alguna frase del presidente a favor de mantener la esencia del modelo financiero del Estatuto. "Ya dijo Zapatero que el proyecto no debía ser desvirtuado", recordó el portavoz del PSC, Miquel Iceta. El Gobierno cree que en el debate del miércoles se sentaron las bases del futuro acuerdo.