Antonio Hernández entra en el inquietante mundo de los sueños
Leonardo Sbaraglia, Angie Cepeda y Laia Marull trazan un relato de amor y posesión
Existen los sueños premonitorios? Con esta pregunta arranca Oculto, la nueva película del director Antonio Hernández, que se estrena hoy en las pantallas españolas. Un thriller psicológico en el que el mundo de los sueños y del azar cobran un inquietante peso en la vida de los tres protagonistas, interpretados por Leonardo Sbaraglia, la colombiana Angie Cepeda y Laia Marull.
"Quería aproximarme al género de la ciencia-ficción, que siempre me había apetecido mucho. Y así llegamos a los sueños, que son una fuente de inspiración muy cercana, algo muy fascinante y extraño. ¿Quién no ha contado alguna vez un sueño? En Oculto nos sirven como vehículo para narrar otra historia, una historia de amor y de posesión", explicó ayer el director en Madrid durante la presentación del filme.
Un extraño monolito que ve en sueños -como el que aparecía en la película de Stanley Kubrick 2001 Odisea en el espacio- obsesiona a Natalia (Angie Cepeda). Éste será el detonante de la inquietante trama en la que pasado y presente se cruzan de manera siniestra. Una fuerza oculta parece unir a este personaje con Beatriz (Laia Marull), que de alguna manera se inmiscuye en sus sueños. Los dibujos que Natalia ve grabados en el monolito son los mismos que Beatriz tiene tatuados. Incapaz de comprender el posible significado de esta aparente coincidencia, despiertan en Natalia los fantasmas de un trágico episodio del pasado. La obsesión y la desesperación la consumen sin que su nuevo amante, Sbaraglia, pueda hacer nada por salvarla.
Obsesión
"Utilicé mis propios tormentos para desmenuzar al personaje, creando un paralelo con mi vida. La verdad es que durante el rodaje lo pasé fatal, pero pensaba que si eso me acercaba al personaje de Natalia, pues entonces estaba bien", afirmaba ayer con una amplia sonrisa Angie Cepeda.
Para Sbaraglia, el reto consistió en hacer "un personaje de reparto que, sin embargo, es protagonista". "Él no hace nada y tampoco le pasa nada, por lo que era complicado darle carácter".
Laia Marull encontró el problema contrario. "Beatriz urde la trama, todas las cosas que ocurren han pasado antes por su cabecita. Ella miente todo el rato, es la mala de la película, pero al final llegas a entenderla. Es un personaje que está confundido y si en algo se parece a la mujer de Te doy mis ojos [Icíar Bollaín], es en que ella tampoco es capaz de asimilar ciertas cosas".
Resentimiento, venganza y posesión son algunos de los temas sobre los que Hernández reflexiona en Oculto. El director habla acerca del sentido y el abuso que se puede hacer de lo supuestamente premonitorio, algo que, según confesó ayer, hace tiempo que descubrió.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.