El sindicato Erne considera ilegal que Interior se reúna con los mandos policiales

El sindicato independiente de la Ertzaintza Erne terció ayer en la polémica que vive estos días la policía vasca tras difundirse un documento firmado por la mayoría de sus mandos en el que muestran su "malestar y desánimo" ante lo que consideran "falta de proporción" de sus sueldos frente a los de los agentes de base. Interior, que ha mostrado su voluntad de reunirse con los jefes policiales, mantiene de forma paralela durante esta semana conversaciones con Erne y CCOO para cerrar el convenio colectivo.

En ese contexto, Erne considera "ilegal" la cita anunciada entre Interior y la comisión que representa a los mandos, ya que la Ley de Policía vasca, de 1992, atribuye a los sindicatos con representatividad en el colectivo la capacidad negociadora para determinar "las condiciones de trabajo" de los agentes. La central independiente opina que "las legítimas reivindicaciones que pudieran tener [los jefes] primero deberían ser trasladadas a las organizaciones sindicales". Erne ha destacado que hasta la fecha no ha recibido ningún documento con dichas peticiones.

Además, la central policial censura que en su texto los altos mandos arremetan contra el preacuerdo firmado por Interior en julio pasado con Erne y Comisiones Obreras, "un preacuerdo que favorece significativamente a los funcionarios que más penosidad, peligrosidad y accidentabilidad sufren", recuerda este sindicato.

La central independiente cree que al poner en "entredicho" el citado acuerdo, están "obstaculizando" la negociación actual con Interior para el nuevo convenio, lo que conduciría a "un enfrentamiento personal y peligroso entre el conjunto de los ertzainas".

El documento de los mandos policiales apunta que la tendencia a la "desproporción" en las retribuciones entre la jefatura y los agentes de base se ha recortado aún más después de la firma del acuerdo. E incluso subraya que este sentimiento de "malestar" y tales agravios comparativos pueden acabar incidiendo "en la eficacia de la Ertzaintza". Ante esta situación, Erne pide al viceconsejero de Seguridad, Mikel Legarda, que no "vulnere la ley" y posibilite un convenio que "dé satisfacción a la mayoría de los intereses sociolaborales y económicos de los ertzainas".