El gobierno local impulsa un plan para reducir el consumo de agua

La concejal de Medio Ambiente de Madrid, Paz González, explicó ayer en el Pleno, a petición propia, el Plan de Gestión de la Demanda del Agua, que contará con un presupuesto de 104 millones de euros. Este plan contempla medidas encaminadas a ahorrar el consumo de agua, obligando a las viviendas y a las industrias, mediante una ordenanza que será promulgada en 2006, a implantar sistemas destinados a tal fin. El plan fue aprobado por la Junta de Gobierno el pasado 14 de julio.

Según González, a partir de 2006, los edificios de nueva construcción deberán disponer de contadores individuales de agua para cada vivienda o local; se establecerán reguladores de presión, necesarios para garantizar una fuerza máxima a mantener durante todos los meses del año; se fijará la instalación de mecanismos economizadores y de reducción de caudal en los grifos y duchas y se exigirá que los grifos de uso público dispongan de temporizadores o cualquier otro mecanismo de cierre automático que dosifique el consumo de agua.

La concejal comentó que éstas son, entre otras, algunas de las medidas estudiadas para incluir en la nueva ordenanza que regulará el uso eficiente del agua en la capital.

Zonas verdes

En el nuevo texto se incluyen como medidas complementarias a las anteriores otras encaminadas a introducir criterios ecológicos en el diseño y mantenimiento de las zonas verdes tanto públicas como privadas y el establecimiento de distintas determinaciones en situaciones de escasez de lluvias, como las limitaciones en el horario de riego de estas zonas verdes o la creación de un registro municipal de piscinas. Esta última medida tiene como objeto rebajar el deterioro del agua y disminuir la frecuencia de los tratamientos para que, una vez filtrada y declorada, pueda utilizarse para el riego de zonas adyacentes.

Tras señalar que el Ayuntamiento de Madrid apuesta por "una nueva cultura del agua", la concejal de Medio Ambiente comentó que estará prohibida cualquier actividad que suponga derroche de agua en la vía pública y se exigirá la adopción de un plan de gestión sostenible del agua a todos los campos de golf ubicados en el término municipal de Madrid.

El concejal socialista Pedro Santín señaló que el plan puede ser interpretado como un "oportunismo político" porque la capital de España no se puede quedar sin agua. Concepción Denche, de IU, señaló que el plan municipal sólo afectará a instalaciones públicas y no impedirá el riesgo de zonas verdes privadas ni de campos de golf ni afectará a piscinas de uso privado.