Los democristianos alemanes cierran filas para que Merkel alcance la cancillería

El grupo parlamentario democristiano (CDU/CSU) cerró ayer filas tras su candidata a canciller Angela Merkel y la reeligió como su jefa con una abrumadora mayoría del 98%: de 222 diputados sólo tres votaron en su contra. Los socialdemócratas (SPD) también reeligieron al presidente del partido, Franz Müntefering, como jefe del grupo parlamentario con un 95% de votos: de 210 diputados, 200 votaron por Müntefering, ocho en contra y dos se abstuvieron. Las primeras conversaciones para formar una mayoría capaz de gobernar y de elegir un canciller las inician hoy el SPD y Los Verdes.

La sorpresa saltó ayer en el partido ecopacifista Los Verdes. En contra de todas las previsiones, el líder de Los Verdes, el ministro de Exteriores Joschka Fischer, de 57 años, anunció que no se presentará a la elección como jefe del grupo parlamentario y ocupará un escaño de simple diputado. No excluyó Fischer la posibilidad de ocupar un puesto en el Ejecutivo si se formase una coalición con la presencia de Los Verdes.

A la cita entre SPD y Los Verdes prevista para hoy seguirán mañana conversaciones de sondeo entre la democracia cristiana (CDU/CSU) con los liberales (FDP) y con su posible socio de una gran coalición, los socialdemócratas. El presidente federal Horst Köhler ha apelado a los partidos a buscar una solución para esta "difícil situación". Sostiene Köhler que "los partidos tienen que mostrar ahora su responsabilidad".

La votación con un resultado búlgaro de los días del comunismo de los diputados de la CDU/CSU a favor de Merkel tiene un valor relativo. El prietas las filas era un prerrequisito funcional ante las difíciles negociaciones que le esperan a Merkel para lograr una mayoría suficiente para elegir canciller. Llegado de Múnich, el primer ministro de Baviera, Edmund Stoiber, arengó con un discurso ardiente a las huestes democristianas para apoyar a Merkel ante su ronda de consultas y tal vez posteriores negociaciones, si los sondeos de los potenciales socios permiten abrigar esperanzas de llegar a acuerdos. Merkel declaró tras su reelección que la votación conseguida subraya que "tenemos derecho a la formación de Gobierno". Calificó Merkel de "tarea complicada, pero realizable" lograr una mayoría para gobernar.

El carrusel de combinaciones, con nombres incluidos, no cesa de girar en Berlín. Bajan las opciones de coaliciones con tripartito, la del semáforo rojo-verde-amarillo (SPD-Verdes-FDP) y Jamaica por los colores de la bandera de ese país caribeño negro-amarillo-verde (CDU/CSU-FDP- Verdes). El presidente del FDP, Guido Westerwelle, rechazó ayer de nuevo cualquier posibilidad de que su partido apoye una coalición del semáforo con el actual canciller Gerhard Schröder o el SPD y Los Verdes en el poder: "El semáforo no recibirá de nosotros ni un solo voto". Según Westerwelle, "los electores nos votaron porque querían acabar con la coalición rojiverde y que no siguiera el desastre de Schröder. No podemos contribuir a eso".

Por su parte, Los Verdes se oponen a Jamaica porque no les cabe en la cabeza encontrar una mínima base común con los democristianos.

Renuncia de candidatos

La gran coalición cuenta con nuevas variantes y modalidades. El diario de gran tirada Bild Zeitung especulaba ayer con la posibilidad de que el SPD acepte ser socio minoritario de una gran coalición CDU/CSU-SPD si Merkel renuncia y también Schröder. Cita Bild a un anónimo dirigente del SPD: "Un canciller que se sacrifique a sí mismo para dejar libre el camino a la formación de gobierno no lo hubo nunca. En este caso Schröder pasaría como un gran hombre en la historia del partido". No habló bajo anonimato el alcalde-primer ministro de Berlín, Klaus Wowereit (SPD), quien dijo que, bajo determinadas circunstancias, el SPD podía renunciar a Schröder, "pero esas circunstancias todavía no se dan".

Para una gran coalición sin Merkel y Schröder ya circulan varios nombres: el del primer ministro de Baviera Edmund Stoiber, el de Baja Sajonia Christian Wulff o el de Hesse Roland Koch por los democristianos y el derrotado primer ministro de Renania del Norte-Westfalia, Peer Steinbrück, por los socialdemócratas. Lo de Stoiber en coalición con el SPD resulta casi inconcebible, pero su nombre se mueve en el carrusel.