Los grandes municipios gastan en fiestas hasta un millón de euros
Los alcaldes aprovechan los programas festivos para publicitar sus logros políticos
Conciertos gratuitos, pregoneros de renombre, las mejores figuras taurinas... Los municipios no escatiman en gastos para complacer a los vecinos durante las fiestas patronales. Muchos tiran la casa por la ventana con unos presupuestos anuales dedicados a los festejos que, en los pueblos con mayor población, oscilan entre los 600.000 euros y el millón. "Por unas buenas fiestas no se ganan unas elecciones, pero algo ayuda", reconoce el concejal de Cultura de un ayuntamiento.
Alrededor del 80% del dinero de las fiestas se destina a los conciertos y a los festejos taurinos, los dos puntos fuertes de cualquier fiesta patronal que se precie. La mayoría de localidades dirigen sus programas festivos a uno de sus núcleos de población más importante: la gente joven. Municipios como Parla, Fuenlabrada, Majadahonda o Pozuelo tienen una población muy joven, algo que las diferencia de Madrid capital. Por eso, la clave se encuentra en los conciertos. Algunos de pago y otros gratuitos. Parla los organiza gratis desde hace más de veinte años; otros, en cambio, se han unido hace poco a la moda de no cobrar entrada.
"A ver qué Ayuntamiento se atreve ahora a dar marcha atrás y poner los conciertos de pago", afirma el responsable de Cultura de un gran municipio. Desde la última legislatura, apenas quedan pueblos donde se pague por escuchar a los mejores grupos. "El dinero de la taquilla no repercute en las arcas municipales, sino que normalmente vuelve a la producción del espectáculo. El cobro de la entrada tampoco beneficiaba a la población", señala Marcelino García, concejal de Cultura de Alcorcón, Ayuntamiento que desde hace tres años ofrece los conciertos de las fiestas gratis. Sin embargo, en pueblos como Pozuelo y Las Rozas hay que pasar por taquilla para ver a grupos como El Sueño de Morfeo.
Este año, Miguel Bosé, Miguel Ríos, Bebe, Hombres G, Saratoga, El Bicho o Andy y Lucas se han paseado, de forma gratuita, por los campos de fútbol y plazas de toros de la región. Se ha dado la paradoja de que una semana había que pagar por ver a Bebe en Pozuelo y dos semanas después la cantante extremeña daba el mismo concierto, gratis, en Fuenlabrada. A veces, también hay un dos por uno: el mismo representante ofrece en el mismo paquete a uno famoso y a otro aún por conocer.
Amaral, de pago
Para los conciertos del dúo zaragozano Amaral el pago es obligatorio en cualquier lugar. Lo exige el grupo. Así, municipios como Fuenlabrada o San Sebastián de los Reyes han tenido que cobrar entrada para este concierto. "Amaral no quiere actuar gratis, pero nosotros conseguimos que en Fuenlabrada actuaran por un precio muy bajo: nueve euros", señala Maribel Barrientos, concejal de Cultura del municipio.
Este año, el Ayuntamiento de Fuenlabrada ha gastado 813.471 euros en sus fiestas patronales, 160.000 más que el año pasado. Un desembolso que no es excepcional. El dispendio en estos eventos festivos tradicionales no distingue ni zona de la región ni partido político. Las fiestas patronales forman parte del programa político de los ayuntamientos.
En Parla, el presupuesto dedicado a fiestas (a las de todo el año) asciende a 700.000 euros, según explica José María Fraile, concejal de Hacienda del municipio. Alcorcón y Pozuelo de Alarcón gastan un millón de euros anuales en sus fiestas.
"Los responsables municipales de los festejos espiamos, preguntamos a los otros ediles por sus programas de fiestas para no coincidir", explica la concejal de Cultura de una localidad del sur.
Además, los alcaldes aprovechan los programas de festejos (que se reparten a diestro y siniestro en entidades vecinales, buzones, edificios públicos...) para hacer propaganda de los logros obtenidos en los dos años de legislatura.
En cuanto a los eventos taurinos, cada municipio tiene su política. Pozuelo invierte en los festejos taurinos (encierros incluidos) unos 300.000 euros. "Nosotros apostamos por un cartel taurino de primer orden. Lo que triunfa en Las Ventas hay que traerlo a Pozuelo", aclara el concejal Mario Utrilla. Lo mismo ocurre en Collado Villalba, que destina a sus fiestas 645.000 euros. Sin embargo, para Majadahonda la aspiración es llegar a un cartel digno, pero acorde con su plaza portátil. "Creo que no se puede traer a Majadahonda un cartel propio de Las Ventas. Hay que ajustarlo a la realidad", indica José Antonio Carnevali, concejal de Cultura. Majadahonda invierte en las fiestas 600.000 euros. "Nosotros creemos que hay que hacer unas fiestas de las que disfrute toda la familia, porque estamos invirtiendo mucho dinero y hay que aprovecharlo".
Donde también rivalizan los pueblos es en los pregoneros. Éstos han pasado este año por figuras locales, como Las Supremas de Móstoles en Móstoles, hasta por conocidas figuras de la televisión, como Boris Izaguirre en Parla o José Luis Gil (el señor Cuesta de la serie de televisión Aquí no hay quien viva) en Fuenlabrada. Ciempozuelos apostó para el pregón por el futbolista Íker Casillas. Alcalá no tuvo un pregonero famoso, pero se desmarcó las pasadas fiestas patronales con un concierto de lujo: el brasileño Carlinhos Brown.
En fuegos artificiales e iluminación para dejar la ciudad bonita, también los ayuntamientos han abierto la mano. En Alcorcón, 300.000 bombillas iluminaron la ciudad durante los pasados festejos patronales, y se gastaron 1.800 kilos de pólvora.
'Botellón' en los recintos feriales
Los responsables municipales de la localidad de Las Rozas, con sus fiestas patronales en puertas, lo tienen claro: la mayor parte del presupuesto (750.000 euros) se destina a las actuaciones musicales. La Policía Municipal de esta localidad tendrá durante los próximos días trabajo doble: más controles de tráfico y, sobre todo, de botellón.
Un escollo con el que tropiezan las fiestas es el consumo excesivo de alcohol dentro del recinto ferial donde se ubican los chiringuitos. Javier Espadas, concejal de Deportes de Las Rozas, afirma que la consecuencia son "algunas peleas y comas etílicos". Una forma de atajar esta situación son los controles por parte de las fuerzas de orden público. "Durante las fiestas patronales, hay mucha vigilancia por parte de la Guardia Civil y de los agentes de la Policía Local. Incluso, agentes de paisano que se mezclan con el público", comenta.
Los ediles de Pozuelo y Majadahonda encargados de las fiestas tienen la misma opinión. "Lo normal es que los jóvenes hagan botellón. Siempre piensas que puede surgir algún problema, aunque hay mucha vigilancia", comenta Mario Utrilla, concejal de Cultura de Pozuelo. Todos están de acuerdo en que hay que trabajar con los chicos para que se conciencien y eviten consumir grandes cantidades de alcohol durante estos días.
En otras localidades como San Sebastián de los Reyes o Leganés, la seguridad se centra, además, en los multitudinarios encierros y que este año dieron más de un disgusto. En Leganés el primer día de encierros se saldó con una pelea dentro de la plaza de toros en la que participaron 100 personas y que terminó con dos detenidos. En San Sebastián, el quinto encierro se saldó con 63 heridos, dos de ellos muy graves.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.