Europa, ambiciosa pero dividida
La Unión Europea llega a la cumbre de la ONU con una posición conciliadora. Quiere que la ocasión sea aprovechada para que se haga más de todo. Apoya una amplia reforma de la institución para incrementar su eficacia, quiere más en seguridad y un compromiso más fuerte con el mundo en desarrollo. Los países de la UE aportan el 38% del presupuesto de la ONU, y con la Comisión Europea, suman casi el 50% de las donaciones que llegan a Nueva York.
Es el primer grupo regional donante, y participa de lleno en las misiones de pacificación, consolidación de la paz y promoción de la democracia. Pero las diferencias de los Veinticinco le resta enteros a la hora de defender su posición. Uno de los temas tabú entre los socios europeos es la reforma del Consejo de Seguridad, donde pervive el enfrentamiento. Alemania lucha por hacerse con un asiento permanente. Francia y Reino Unido, que ya tienen un puesto fijo, le apoyan. Pero Italia y España prefieren una ampliación de los puestos rotatorios.
