Los hoteles de la costa alcanzan el 80% de ocupación

El presidente de la Federación de Empresarios de Hostelería y Restauración de Cataluña, Joan Molas, calificó ayer de "satisfactoria" la temporada de verano, con ocupaciones superiores al 80% en la costa en julio y cercanas al completo en agosto, aunque destacó el descenso del número de pernoctaciones. El turismo rural del Pirineo, por contra, ha vivido semanas malas, según Molas.

Molas indicó que, según los datos provisionales, en la Costa Daurada (Tarragona) este verano ha sido "similar" al del año pasado, con una ocupación del 87% en julio y del 93% en agosto. Además, se ha producido un "ligero incremento del precio medio" y ha descendido el número de estancias. Los hoteleros de la Costa Brava han percibido una mejora respecto a los dos últimos años, gracias al aumento de la tasa de ocupación y de las tarifas. En julio alcanzaron el 80%, y en agosto entre el 90% y el 95%, prácticamente lleno, debido sobre todo a la recuperación del turismo británico y a la consolidación del francés, italiano y español.

En cuanto a Barcelona, donde se ha dado el mayor aumento de plazas hoteleras en los últimos años, el mes de julio fue "correcto" y también el de agosto, con ocupaciones medias de entre el 80% y el 85%. Molas destacó que en la capital catalana "los visitantes han acortado la estancia" y "el gasto también ha sido inferior". El precio por habitación ha disminuido y se ha situado entre "8 y 10 euros por debajo del año pasado". "Mantenemos ocupación, con precios inferiores y con estancias más cortas", agregó.

En su opinión, el turismo rural está consolidado pese a que esta temporada "comenzó tarde, con una afluencia de visitantes mala en julio y corta en agosto, lo que ha provocado que la ocupación no haya sido buena".