Egibar contradice a Imaz y apuesta por la mesa de diálogo aunque siga la violencia

El presidente del PNV de Guipúzcoa y portavoz del grupo nacionalista en el Parlamento vasco, Joseba Egibar, se mostró ayer partidario de constituir mesas de diálogo aunque ETA no haya abandonado la violencia. La postura de Egibar es totalmente contraria a la manifestada por el presidente de su partido, Josu Jon Imaz, quien apenas 24 horas antes aseveró con contundencia que "no habrá tal mesa [de partidos] con Batasuna sin un cese total de la violencia".

La polémica de Egibar con el presidente de su formación es la segunda prácticamente consecutiva que enfrenta a ambos. Egibar sostuvo ayer, en unas declaraciones a la emisora pública Radio Euskadi, que no se pueden poner condiciones previas "que puedan determinar el desarrollo de esa mesa". Según argumentó, "si alguien dice que vamos a constituir una mesa de normalización y pacificación, pero es necesario que desaparezca ETA, también alguien contestará que para ese viaje se habrá tenido que trabajar previamente ese escenario, sea en formato mesa o en formato conversación".

El anterior conflicto fue el 31 de julio, cuando Egibar, que encabeza el sector crítico, le pidió en Mutriku (Guipúzcoa) a Imaz, apenas unas horas después de que éste apostara por la "soberanía compartida con España", que le explicara qué es eso. El presidente guipuzcoano dijo que con ese concepto el dueño siempre será el dueño y el inquilino será el inquilino. "Y los vascos no hemos nacido para ser el inquilino ni el criado de nadie", criticó entonces.

"Fase de diálogo"

La presidenta de EA, Begoña Errazti, se alineó ayer con Egibar, al asegurar en contra de la tesis de Imaz que no se puede compartir la soberanía "cuando no se tiene". Errazti apostó en San Sebastián, durante el acto político de inicio del curso, por "pasar de la fase previa de búsqueda de interlocución a la del diálogo y el acuerdo político".

Sin embargo, el secretario general del PSE, Patxi López, coincide con el presidente del PNV en que es imprescindible el fin de la violencia. Aseguró que los socialistas no estarán en una mesa si no ha desaparecido la violencia y los herederos de Batasuna no la rechazan de forma expresa. López advirtió también de que ese foro de partidos "no puede ser la coartada" para legitimar objetivos partidistas como el plan Ibarretxe u otro similar. "Se trata de buscar lo que nos une en la definición de un país plural y en la búsqueda de un marco político que pueda ser compartido por todos", dijo tras reconocer que el inicio de la legislatura estará marcado por las conversaciones de "todos con todos".

Por su parte el secretario de organización del PSOE, José Blanco, recomendó al dirigente del PSE Rodolfo Ares que, si cree que hay indicios de vinculación entre EHAK y Batasuna, "se vaya a la fiscalía".