El déficit exterior español casi se duplica por la caída del turismo
La crisis que atraviesa el sector exterior español se agrava. La balanza por cuenta corriente (mide los ingresos y pagos al exterior por intercambio de mercancías, servicios, rentas y transferencias) registró un déficit acumulado en los cinco primeros meses del año de 26.040 millones de euros, un 90% superior a igual periodo de 2004, según el Banco de España. La principal causa del aumento del déficit fue la menor entrada de ingresos por el turismo, cuyo superávit se redujo un 12,5% en idéntico periodo, hasta 7.690,6 millones.
Además, las exportaciones siguen creciendo a menor ritmo que las importaciones, una situación que pone en evidencia la fortaleza del consumo interno español, pero también la escasa competitividad de su economía. Así, el déficit de la balanza comercial ascendió de enero a mayo a 26.173,4 millones, un 44,9% más que en igual periodo del año anterior. Las exportaciones de mercancías se incrementaron un 3,7% en tasa interanual, frente a un crecimiento de las importaciones del 13,1%.
Mientras, las inversiones directas hasta mayo dieron lugar a flujos netos de salida de 5.525 millones, por encima de las salidas netas de 4.134,6 millones contabilizadas en el mismo periodo de 2004. Las inversiones directas de España en el exterior registraron salidas de 12.135,5 millones, que superaron las entradas de las del exterior en España (6.610,5 millones).
Críticas del PP
Tras la publicación de estos datos, el secretario ejecutivo de Economía y Empleo del PP, Miguel Arias Cañete, aseguró en una nota de prensa que el sector exterior español está en el "peor" momento de su historia, y denunció la "pasividad" del Gobierno. El constante aumento del déficit exterior es uno de los principales problemas que afronta en la actualidad la economía española. El PIB creció un 3,4% en el segundo trimestre respecto a idéntico periodo de 2004, el mayor ritmo en cuatro años, pero el deterioro del sector exterior siguió restanto puntos al crecimiento (2,5 puntos).
La caída de ingresos por el turismo es otro motivo de preocupación. Un informe de Caixa Catalunya destaca que este sector está perdiendo peso en el conjunto de la economía: el superávit de los servicios turísticos representó en 2004 el 3,5% del PIB nominal, frente al 4,0% de 2003.
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