Lecturas en el subsuelo
El Bibliometro, inaugurado en pruebas en la estación de Nuevos Ministerios
La idea sonaba bien: aprovechar el metro para montar una red de préstamo de lectura en el suburbano. Pero se fue retrasando. El pasado 27 de julio, después de dos años de espera, se abrió el primer módulo de Bibliometro con tres meses de retraso sobre la fecha prevista. Está en Nuevos Ministerios y funciona de dos a ocho de la tarde.
Según la Concejalía de Las Artes del Ayuntamiento de Madrid, la tardanza se debió a que el proyecto creció con la incorporación de la Comunidad: "En lugar de los cuatro módulos que habíamos previsto se implantará en ocho. Además, el sistema informático ha sido muy complicado y por ello hemos tardado tanto en llevarlo a cabo".
Desde el 27 de julio ya se han apuntado 618 personas -115 el primer día- y se han prestado 538 libros. La próxima estación que tendrá bibliometro, según aseguran desde las Artes, será Canal, a partir de las próximas semanas. Después, Aluche y Moncloa para septiembre. Las estaciones de los otros cuatro módulos del Bibliometro que se pondrán en marcha aún no se han concretado, aunque según la Concejalía de las Artes estarán listos a finales de año.
En sólo 14 días se han apuntado 618 personas y han solicitado 538 libros
El anuncio de la biblioteca suburbana tuvo un largo recorrido:
- Abril 2003. Promesa electoral. Alberto Ruiz-Gallardón incluyó el Bibliometro en su programa electoral para las elecciones municipales del 25 de mayo como "un servicio de préstamo gratuito de libros en el metro".
- Septiembre 2004. Presentación oficial. El Bibliometro es presentado en sociedad. Con el lema Leer es viajar, Gallardón y Alicia Moreno, concejal de Las Artes, anuncian que a partir de abril de 2005, coincidiendo con el centenario del El Quijote, habrá espacios de préstamo gratuito de libros en Moncloa, Nuevos Ministerios, Canal, Atocha-Renfe y Príncipe Pío. La empresa encargada de gestionarlo será privada y en total se gastarán 4,5 millones de euros hasta 2007.
- 7 de junio 2005. '¿Qué ha sido del Bibliometro?'. La oposición en el Ayuntamiento convoca una rueda de prensa para criticar la gestión cultural del Ayuntamiento. Las socialistas Trinidad Jiménez y Rosa León recuerdan que aún no se ha puesto en marcha el proyecto de lectura en el suburbano: "¿Y qué ha sido del Bibliometro?", se preguntó Jiménez por la mañana. Por la tarde, el coordinador general del Área de las Artes, Carlos Baztán, anunció que el Bibliometro se pondría en marcha el 15 de julio en la estación de Nuevos Ministerios y que antes de fin de año funcionaría en siete estaciones más.
- 27 julio 2005. Por fin nace el primer módulo del Bibliometro. La Comunidad y el Ayuntamiento firman un acuerdo para mejorar la red de bibliotecas públicas. Como fruto del acuerdo nace el primer módulo del Bibliometro. En la estación de Nuevos Ministerios, pasados los tornos de entrada, en la planta -3, los usuarios encuentran la ansiada biblioteca del suburbano. "Aún está en pruebas y se presentará oficialmente en septiembre próximo", explican fuentes municipales.Para hacerse el carné y pedir prestados los libros sólo se atiende en horario de tarde. "Cuando los viajeros vuelven a comer o salen de trabajar, más relajados", explica Vanessa Lopes desde el puesto de Nuevos Ministerios. Es gratuito y el préstamo se hace en el momento por 15 días, con posibilidad de renovarlo. Los usuarios son obsequiados con un marcapáginas que indica la fecha de devolución. En caso de que se retrase la entrega del libro, al usuario se le anulará el carné tantos días como retraso lleve.Existen catálogos de mano donde los usuarios pueden consultar los 502 títulos disponibles (con autores nacionales e internacionales). También hay una pantalla táctil donde se pueden buscar los libros por autor, título o género. Además han creado un apartado de recomendaciones: El Quijote, La Guerra de los mundos, Las brujas y Los gozos y las sombras.José Manuel Romero es uno de los primeros clientes del Bibliometro. Trabaja de vigilante de seguridad en la estación y en cuanto se abrió el puesto cogió Las flores del mal de Baudelaire. "No estaba en la biblioteca del barrio, así que en cuanto vi que lo tenían aquí, lo cogí", dice. "Pero me ha parecido muy raro, así que lo voy a devolver ya y me voy a coger La voz dormida, de Dulce Chacón"
