Energía española para el Magreb
La región se convierte en vía estratégica de expansión para las compañías eléctricas
El norte de África y Oriente Próximo se han convertido en regiones estratégicas para la expansión internacional de las empresas españolas de energía. La construcción del gasoducto Medgaz, que unirá España con Argelia en 2008, y el proyecto de interconexión eléctrica con Marruecos que lidera Red Eléctrica, han actuado como detonantes de una escalada de inversiones en los países ribereños del sur del Mediterráneo que, en el caso de Repsol YPF, se eleva a 1.900 millones de euros hasta el año 2009.
Iberdrola ha ganado el contrato de distribución en la región argelina de Constantine, y Unión Fenosa ha logrado nuevos contratos en Etiopía
Repsol YPF invertirá 1.900 millones para reforzar su posición en Argelia y Libia durante los próximos cuatro años
La petrolera española había firmado, ya a finales de diciembre, el mayor contrato para la realización de un proyecto de gas en Argelia llevado a cabo por un consorcio internacional en ese país para desarrollar un proyecto integrado de exploración, producción y comercialización conjunta de gas natural licuado (GNL) en la zona de Gassi Touil, al este del país, consiguiendo así una posición de liderazgo en Argelia y el acceso directo, por primera vez, a reservas de gas natural para cubrir la creciente demanda del mercado.
El proyecto, participado en un 60% por Repsol YPF y en un 40% por Gas Natural, prevé una inversión conjunta de 1.628 millones de euros, e incluye también la construcción de una planta de licuación de gas natural en Arzew, para comercializar conjuntamente el gas procedente de la zona de producción adjudicada.
Repsol YPF, que es también la primera compañía petrolífera privada en Libia, tiene previsto desarrollar en estos dos países 83 nuevos pozos en el próximo cuatrienio. La idea es que estos pozos permitan aumentar las reservas probadas de hidrocarburos en la zona un 170% y en un 50% la capacidad de producción.
También Cepsa, que participa en el proyecto del gasoducto Medgaz junto a otras compañías -Iberdrola, Endesa, BP, Total, Gaz de France y la argelina Sonatrach-, ha sido invitada el pasado mes de junio por el Gobierno argelino a invertir en ocho plantas de refino y petroquímica en el país norteafricano, con un coste total de 6.500 millones de euros.
La petrolera española ha iniciado también negociaciones con el Gobierno de Mauritania para formalizar un acuerdo de colaboración petroquímica y, en asociación con la compañía italiana IEOC, filial de ENI, ha ganado el contrato de exploración de hidrocarburos en el desierto occidental de Egipto, para una extensión de 4.297 kilómetros cuadrados durante un periodo de tres años. Además, Cepsa ha adquirido una participación del 20% en un contrato de exploración en el golfo de Suez.
Entre las compañías eléctricas, Iberdrola aparece como la más dinámica en la región, donde hace sólo unas semanas, su filial Iberinco acaba de ganar el contrato para modernizar la red eléctrica de la región argelina de Constantine. Éste es un proyecto que, en principio, estará finalizado en año y medio.
Iberdrola tiene el 12% del gasoducto Medgaz, que unirá las ciudades de Béni Saf y Almería, y en julio del año 2004 firmó un contrato con Sonatrach para la compraventa de gas natural por 1 bcm (1.000 millones de metros cúbicos) anuales desde 2007, y a largo plazo, que será suministrado a través del nuevo gasoducto.
Central en Marruecos
La eléctrica española ha sido preseleccionada, asimismo, por la Office Nacional de la Electricité de Marruecos, para la construcción, explotación y mantenimiento de una central de ciclo combinado, con una capacidad de trabajo de 800 megavatios, en las proximidades de la presa de Al Wahda.
También el año pasado, un consorcio liderado por Iberdrola Ingeniería y Construcción (Iberinco) se adjudicó el proyecto para modernizar la red de distribución eléctrica de seis regiones de Túnez por 25 millones de euros, tras ganar la licitación pública internacional convocada por la Societé Tunisienne de l'Electricité et du Gaz (STEG).
La filial de Iberdrola llevará a cabo las actuaciones para mejorar el suministro eléctrico en dichas zonas en un año y medio. Éstas incluyen la construcción y puesta en funcionamiento del Centro Nacional de Distribución, en la capital tunecina, y de cinco sedes en Sousse, Grombalia, Jendouba, Gabès y Gafsa, que albergarán sendos centros regionales.
Iberinco participará también junto a Red Eléctrica Internacional (REI) en un proyecto para optimizar la explotación de la red de distribución eléctrica de Libia, propiedad de la compañía eléctrica estatal GECOL.
Dentro de los diversos proyectos de ingeniería que se están realizando en la zona, ha sido también una compañía española, la empresa de servicios industriales de ACS, MASA, la ganadora del primer contrato del gasoducto Medgaz, en consorcio con la constructora argelina Cosider. El contrato asciende a 74 millones de euros para el diseño, suministro y construcción de una tubería de acero de 300 kilómetros de longitud y 1,22 metros de diámetro.
Las obras están destinadas al transporte de gas natural desde los campos argelinos de Hassi R'Mel hasta la localidad de Sougueur. El consorcio hispano-argelino, que competía con la compañía estadounidense Wilbros y la empresa rusa Stroytrangas, dispone de un plazo de 20 meses para la construcción del tramo.
Unión Fenosa, aunque centra la reactivación de su negocio internacional en Europa del Este, está implantada a través de su filial Soluziona en Egipto y Túnez, y ha reforzado su posicionamiento en la región magrebí con un nuevo contrato en Etiopía, con la Etiopía Electricity Power Corporation.
Asimismo, el norte de África es zona prioritaria en los proyectos de expansión exterior de Red Eléctrica Internacional que, al margen de la interconexión con Marruecos, está desarrollando proyectos de asesoría y consultoría en este país para la Office Nacional de l'Electricité (ONE) para calcular la potencia eólica que podría asumir el sistema eléctrico marroquí en el horizonte de 2010 además de un curso, recientemente finalizado, sobre diseño de apoyos para líneas de 60 kilovatios.
La filial de Red Eléctrica trabaja también con la General Electricity Company of Libya (GECOL) en la realización de un estudio para calcular los tiempos máximos que puede aguantar una subestación sin desconectarse del sistema y en el diseño de un plan de defensa de la línea que interconecta los sistemas oriental y occidental de Libia con objeto de determinar cómo mejorar el sistema de protección de la línea para evitar la separación de los dos subsistemas en caso de incidentes en el este de Libia.
Y, finalmente, en Argelia, Red Eléctrica ha impartido tres cursos de formación de operadores de centros de control. Lo ha hecho para el personal de la compañía Societé Nacional de l'Electricité et du Gaz (Sonelgaz).
El Refuerzo Mediterráneo
Con objeto de permitir una mayor capacidad de intercambio de energía, Red Eléctrica de España y l'Office National de l'Electricité de Marruecos tienen en proyecto conjunto el Refuerzo Eléctrico Mediterráneo Occidental (REMO) mediante la construcción de un segundo circuito de similares características al existente. Este nuevo circuito está constituido por un tramo submarino y dos tramos subterráneos a cada lado del estrecho de Gibraltar. Es la única interconexión entre Europa y el Magreb y, además, se trata de la única interconexión submarina entre dos continentes.
Responsables de la compañía española estiman que la ventaja fundamental del tendido de un segundo circuito en la interconexión España-Marruecos se traduce directamente en el aumento de la fiabilidad asociada, al disponer de dos elementos de conexión. El proyecto de refuerzo consiste en el tendido de tres cables subterráneos de 2,05 kilómetros en el lado español y 0,25 kilómetros en el marroquí, y el tendido de tres cables submarinos de 29 kilómetros aproximadamente. Además, se contempla la ampliación de las estaciones terminales de Tarifa y Fardioua aprovechando las infraestructuras existentes.
El crecimiento de la demanda en los países del Magreb, así como los grandes recursos energéticos disponibles en Argelia (gas natural) y en otros países situados más al este, así como los movimientos hacia la apertura de estos mercados, hacen que sea todavía mayor el protagonismo de un más robusto enlace eléctrico Mediterráneo Occidental. Por tanto, el aumento del nivel de intercambio no sólo es deseable desde el punto de vista de integración de los mercados, sino desde el punto de vista de la seguridad del sistema y de sus requerimientos.
El proyecto ha sido declarado de interés comunitario por la Unión Europea, contando con financiación comunitaria, así como el Banco Europeo de Inversiones (BEI) y el Banco Africano para el Desarrollo (BAD). Entre noviembre de 2005 y enero de 2006 está previsto el tendido de los cables submarinos y la instalación de los medios de protección. La puesta en servicio de la instalación está prevista para abril de 2006.
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