Alonso adelanta su comparecencia al día 11, pero el PP pide que acuda "mañana"

El próximo día 11 de agosto el ministro del Interior, José Antonio Alonso, comparecerá en el Congreso para dar a conocer el resultado de la investigación sobre la muerte de un detenido en el cuartel de la Guardia Civil de Roquetas de Mar (Almería). Aunque se ha adelantado una semana respecto a la previsión inicial, el PP estima que es tarde y debe producirse "mañana". El portavoz del PSOE en el Congreso, Alfredo Pérez Rubalcaba, recalcó que sería "un error dramático" pensar que hechos así ocurren "habitualmente en las comisarías", aunque se depurarán "todas las responsabilidades".

La celeridad que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha querido imprimir a las explicaciones sobre la muerte de un detenido en el cuartel de la Guardia Civil de la localidad almeriense de Roquetas de Mar se ha cumplido, después de algunos titubeos. El ministro del Interior, José Antonio Alonso, informó en un primer momento a Zapatero de que previsiblemente estaría en condiciones de dar toda suerte de explicaciones precisas el próximo día 17. Pero ayer decidió que el día 11 podrá dar toda suerte de datos.

El Congreso de los Diputados recibió ayer la comunicación de la presidenta de la Comisión de Interior, la socialista Carmen Hermosín, de que la comparecencia tendrá lugar el próximo día 11. Alonso también habló personalmente con Hermosín. Todos los grupos parlamentarios fueron informados ayer del cambio de fecha. Ahora bien, el PP considera que la reacción está siendo tardía ya que han pasado muchos días desde que se produjeron los hechos. La comparecencia de Alonso, debe producirse de inmediato. "Mañana", dijo la portavoz actual del PP y responsable de Política Social, Ana Pastor.

Pero al Gobierno le embarga otra preocupación. Se trata de evitar que se extienda la impresión de que hechos son frecuentes. El portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba, señaló que se trataría de un "error dramático" pensar que acontecimientos así ocurren "habitualmente en las comisarías españolas". El ministro de Defensa, José Bono, también insistió en la "depuración de responsabilidades", y reiteró un mensaje de tranquilidad. Esta salvaguarda la reiteró igualmente la dirigente del PP Ana Pastor.

Las presiones de IU

Lo cierto es que Izquierda Unida, grupo que ha presionado desde el primer momento para que el Gobierno diera explicaciones de inmediato, también desde el primer momento señaló que la Guardia Civil era la principal interesada en esclarecer los hechos por su propia honorabilidad y profesionalidad. Eso sí, Gaspar Llamazares, coordinador general de IU, se mostró ayer satisfecho por el devenir de los hechos una vez que Zapatero instó a que la información se diera cuanto antes.

"Los ciudadanos pueden estar tranquilos porque en este tema se sabrá toda la verdad", aseguró en Buenos Aires (Argentina) la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, en referencia a la muerte del agricultor, informa Naiara Galarraga. "El Gobierno ha actuado desde el primer momento con rapidez, contundencia y con total transparencia", recalcó. "Ante hechos como éstos la posición del Gobierno va a ser de tolerancia cero", señaló la vicepresidenta parafraseando al secretario general del Grupo Socialista, Diego López Garrido, que utilizó esa expresión desde el primer momento. De la Vega se negó a comentar las declaraciones del director de la Guardia Civil, Carlos Gómez Arruche, quitando importancia a lo ocurrido con el argumento de que no comenta "los comentarios de cargos públicos".

El PP reiteró sus críticas a Gómez Arruche. Ante las críticas del PP por la tardanza, el Gobierno recordó la muerte del guineano Antonio Augusto Fonseca Méndez, fallecido en mayo de 2000 en una comisaría de Arrecife de Lanzarote.

El entonces ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, dio explicaciones en septiembre de ese año, a instancias del actual ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar.