Rajoy exige "una investigación para saber qué pasó y para que no vuelva a ocurrir"

Antes de acudir al funeral por las 11 víctimas del incendio de Guadalajara, Mariano Rajoy, líder del PP, visitó los pueblos de Ciruelo del Pinar y Mazarete con los alcaldes y habló con los vecinos en la plaza del segundo pueblo. Rajoy anunció que el PP exigirá "al Gobierno que se abra una investigación para saber lo que pasó y para que se tomen medidas para evitar que una cosa así pueda volver a ocurrir". En Mazarete Rajoy prometió a los vecinos dedicar todo el esfuerzo "de un partido que está en la oposición" para reclamar al Ejecutivo medidas que "den un medio de vida a la comarca"

Ciruelos del Pinar y Mazarete están la frontera con el fuego. En el desvío de laa carretera de Alcolea del Pinar a Teruel camino de Ciruelos del Pinar empiezan a verse lenguas de terreno ennegrecidas por el fuego al lado de otras que fueron sorprendentemente amnistiadas por las llamas. Ciruelos del Pinar es un pueblo pequeño con algunas casas de reciente construcción que parecen segunda vivienda de vecinos que hayan ido a trabajar a Guadalajara o a Madrid. A la entrada del pueblo pueden verse montones de troncos preparados para llevar al aserradero. Tal y como ha quedado el monte pocos más podrán tener ese destino.

Jesús López, alcalde socialista de esta localidad, le dijo ayer a Rajoy que ahora queda esperar unos tres años para ver cuántos de los pinos afectados por las llamas son capaces de rebrotar. Los que no, quedarán para leña y el alcalde se quejó de lo poco que les darán por la madera quemada. El regidor de Ciruelos acompañó después a Rajoy y a la alcaldesa de Mazarete, Lucía Enjuto, del PP, a una ermita a mitad de camino entre las dos localidades. Allí, según le contó Lucía Enjuto a Rajoy, celebran todos los años una romería. Tras la misa en la ermita los vecinos solían cruzar al pinar que ahora ha quedado calcinado.

Por ese monte, del que aún quedaban vestigios de humo caliente, subió Rajoy con algunos vecinos y los dos alcaldes e hizo unas declaraciones para los medios de comunicación. El líder del PP aseguró que había ido a Mazarete con el siguiente objetivo: "He venido a reunirme con los representantes de los vecinos, a expresarles a todos mi pesar por lo ocurrido, a transmitir mi solidaridad con las familias de los fallecidos y con todos los vecinos ante esta enorme desgracia".

Rajoy fue preguntado si el PP iba a reclamar alguna dimisión más tras la renuncia, el jueves, de la consejera de Medio Ambiente de la Comunidad de Castilla-La Mancha, Rosario Arévalo. "No es un día de pedir dimisiones. Ya hablaremos de política. Hoy lo más urgente es reclamar al Gobierno central y al de Castilla-La Mancha que tomen medidas concretas, ya, para que estas tierras puedan recuperar cuanto antes su modo de vida o puedan tener una forma alternativa de ganársela".

Después de esta breve excursión por el monte quemado, Rajoy fue a la plaza del pueblo de Mazarete, gobernado por el PP. Allí fue ovacionado por los vecinos al grito de "presidente, presidente".

Luego, el líder del PP estuvo hablando con los vecinos. Les dijo que él, como gallego, tiene mucha experiencia en la capacidad devastadora de los incendios, aunque matizó que en Galicia "se ha avanzado mucho" para intentar luchar contra esta plaga del verano.

Medio de vida alternativo

En clave política, Rajoy prometió a los vecinos poner todo lo que esté de su mano para que "en el Parlamento" el Gobierno explique cuáles van a ser las medidas de ayuda a la zona. Lo más relevante fue que Rajoy anunció que el PP solicitará una investigación, sin especificar si se trata de una comisión de investigación en el Congreso de los Diputados, para que se averigüe qué falló y qué debe hacerse para que los incendios no se cobren vidas humanas.

"Ahora estoy en la oposición pero les garantizo que ni yo ni mi partido les vamos a dejar solos", prometió Rajoy para señalar a los diputados y senadores de Guadalajara que le acompañaban y a los parlamentarios autonómicos que le acompañaban y encomendarles a todos que se ocupen de atender las reclamaciones de los vecinos.

Rajoy estuvo acompañado por el presidente del PP de Castilla-La Mancha y alcalde de Toledo, José Manuel Molina; por el senador y presidente del PP de Guadalajara, Antonio Román; por el senador de esa provincia Luis Fraga; por los diputados alcarreños José Ignacio Echániz y Mari Ángeles Font y por los diputados autonómicos Ana Guarinós, José María Bris y Carmen Plaje.

También estuvieron por parte de la dirección nacional del PP, Sebastián González, secretario de Organización; el diputado Juan Carlos Vera y el senador Tomás Burgos.