El tráfico en las autopistas vascas creció un 3,5% en 2004
Los tramos abiertos de la Eibar-Vitoria registraron 5.300 vehículos diarios
El tráfico en las dos principales autopistas que cruzan Euskadi, la A-8 y la A-68 creció el pasado año cerca de un 3,5% y superó los 55.000 vehículos diarios. Tras la reducción del peaje, al pasar a manos públicas la A-8 (Bilba-Behobia), el tráfico se situó en más de 30.500 vehículos al día. A estas vías de comunicación hay que añadir la Eibar-Vitoria, que entró parcialmente en servicio en 2004 y soportó un tránsito diario de 5.300 coches al día. El uso de las autopistas reportó más de 213 millones de euros a la concesionaria privada de la A-68 y a las dos diputaciones en la A-8.
La A-8, conocida también como Bilbao-Behobia que comunica la capital vizcaína con la frontera de Francia a lo largo de 106 kilómetros, ha vivido su primer año completo con la gestión en manos públicas. El 6 de junio de 2003, la autopista, propiedad de las diputaciones vizcaína y guipuzcoana desde 2001, dejó de ser una concesión privada para convertirse en pública, una vez que las instituciones forales decidieran mantener el peaje.
Entonces el canon se redujo a casi la mitad, aunque desde entonces se han mantenido las diferencias en los tramos vizcaíno y guipuzcoano. En el primero, la mayoría de las reducciones rondaron el 35%, mientras que en algunos tramos de la autopista en Guipúzcoa alcanzó el 53%. A ello se une que los conductores habituales guipuzcoanos pueden tener un 75% de descuento adicional al beneficiarse del sistema de rebajas iniciado en 1998 en ambos territorios en 1998. La Diputación de Vizcaya lo suprimió con el paso de la concesión a manos públicas. A un guipuzcoano le puede costar cuatro veces menos el uso de la A-8.
30.569 en la A-8
El pasado año, el tránsito en la A-8 ha sido los 30.569 vehículos, según la llamada intensidad media diaria (IMD), que contabiliza el número de vehículos que recorren cada jornada el trayecto íntegro de la autopista, de manera que se suman los tramos que realiza cada vehículo.El tramo guipuzcoano, que supone tres cuartas partes de la Bilbao-Behobia, registró el pasado año una IMD de 32.228, con una subida en torno al 4%. En el área vizcaína, el tránsito medio ascendió a 28.911 vehículos diarios, un 4,1% de subida, cuando en 2003 el crecimiento había sido del 8%. En tramos como el de Durango hasta el límite con Guipúzcoa, el incremento ha superado el 10%.
En la A-68, que une Bilbao con Zaragoza a través de Álava, la Rioja y Navarra, la afluencia media en el tramo vasco (hasta el enlace con la autopista a Burgos), alcanzó los 24.606 vehículos diarios, un 3% más que en 2003, según los datos aportados por la concesionaria de la Vasco-Aragonesa, formada por las empresas Iberpistas y Sacyr.
El crecimiento es similar al de 2003 (entonces fue del 3,2%), con lo que se estabiliza el incremento que se produjo en 2000, cuando pasó de 16.800 a casi 22.000 vehículos. Entonces se redujo el peaje una media del 40% -que para algunos alaveses puede llegar al 75% merced a los descuentos fijados por la Diputación- a cambio de que el Gobierno central prolongase la concesión, que debía concluir en 2011, otros 15 años.
En la Eibar-Vitoria, que ya tiene abiertos dos tramos hasta Bergara con más de 13 kilómetros de trayecto, se superaron los 5.300 vehículos diarios de afluencia, según los datos de la Diputación de Guipúzcoa.
Más ingresos
Los ingresos por peajes en las dos autopistas superaron los 213 millones de euros, aunque en el caso de la Vasco-Aragonesa los 125,4 millones facturados incluyen todo el trayecto desde Bilbao hasta Zaragoza, que suma 294 kilómetros. La concesionaria logró 10 millones más de ingresos que en 2003. La A-8 generó alrededor de 73 millones: más de 40 procedentes del tramo guipuzcoano y 33 del vizcaíno. La Diputación de Guipúzcoa obtuvo, entre la Bilbao-Behobia y los dos tramos abiertos en la Eibar-Vitoria, 45 millones.
La institución foral de este territorio invirtió 53,2 millones de euros en las dos autopistas y para este ejercicio ha presupuestado 165 millones. En esta partida destacan la apertura del tercer tramo de la Eibar-Vitoria, que llegará a Arrasate a finales de julio, y el inicio de los trabajos hasta Eskoriatza. Además, se pondrá en marcha para diciembre el tercer carril de la A-8 entre Oiartzun y Ventas de Irún. En Vizcaya, la Diputación ha comenzado también la ejecución de los terceros carriles en la zona de Galdakao.
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