Repóquer bursátil
Partygaming protagoniza la mayor salida en la Bolsa de Londres en cinco años
La city londinense ha vivido la mayor salida a Bolsa de los últimos cinco años. La protagonista es Partygaming, una compañía de Gibraltar que ofrece partidas de póquer por Internet, y que vale ya más que British Airways o Dixons. Es una de las grandes empresas de una industria, la del juego online, que se multiplicará por seis en los próximos cinco años. Para eso, en todo caso, debe primero superar los problemas legales que tiene en Estados Unidos.
La compañía facturó 9,7 millones de dólares en 2002, sólo con el poker. La cifra se ha multiplicado por 60 en sólo dos años
Partygaming nació en 1997. Este grupo británico ofrece juegos de casino y un bingo, pero el 92% de sus ingresos proviene de las mil millones de partidas de póquer que cada año se juegan en su web estrella, Partypoker.com. Según los datos de la compañía, su página tiene el 50% del mercado del póquer en Internet, un negocio que movió unos 1.000 millones de dólares en 2004, 10 veces más de lo que facturaba dos años antes.
La popularidad del póquer online ha crecido mucho en estos años debido, sobre todo, a las ingentes inversiones en mercadotecnia que realizan las web del sector. Sólo Partygaming se gastó 100 millones de dólares el año pasado en este concepto, promocionando partidas con premios que llegan al millón de dólares o regalando cruceros.
Las finanzas de Partygaming se han beneficiado de esta creciente popularidad. El número de jugadores que apuestan dinero real en su web ha pasado de los 6.000 que había en diciembre de 2002 a los 324.000 de 2004. Este incremento ha impulsado, a su vez, los resultados de la compañía: ingresó 601 millones de dólares en 2004, frente a los 30 millones de 2002, y obtuvo unos beneficios después de impuestos de 350 millones, sobre los 4,7 millones de 2002. Sólo el negocio del póquer ha crecido espectacularmente. Partypoker facturó 9,7 millones de dólares en 2002. La cifra se ha multiplicado por 60 en sólo dos años, hasta los 553 millones.
La compañía decidió hace unos meses salir a Bolsa. Según explica Fergus Wheeler, portavoz de Partygaming, el grupo lo ha hecho para "incrementar su credibilidad, transparencia y reputación entre los clientes, los sistemas de pago, los socios, los reguladores y los empleados, y además en un momento", añade, "en el que el grupo está intentando expandirse internacionalmente".
Sobredemanda del 150%
Partygaming encargó a Dresdner Kleinwort Wasserstein que sacara el 23% de su capital a cotizar. El precio se fijó en 116 peniques -es la mayor salida a Bolsa de la city desde que en 2000 saltara al parqué Dimension Data-, y se produjo una sobredemanda del 150%. El primer día de cotización, el 27 de junio, la compañía subió un 11%. Su valor: 5.900 millones de libras, unos 8.500 millones de euros, más que British Airways, Dixons o ITV. Con lo que vale Partygaming, la compañía entra ya en la categoría de valores elegibles para cotizar en el selectivo FTSE100. La salida a Bolsa ha hecho también muy ricos a los cuatro propietarios de la compañía: Ruth Parasol, su marido James Russell Deleon, Anurag Diksit y Vikrant Bhargava. Una información de la BBC asegura que las participaciones de estos socios podrían valer un millón de libras (1,4 millones de euros).
Con su salida a Bolsa, Partygaming sigue los pasos de Betfair, Betandwin, Sportingbet. Todas ellas son páginas de juego y apuestas por Internet que cotizan en la Bolsa de Londres. "El mercado londinense es el principal cuando se trata de invertir en compañías de juego por Internet", dice Wheeler. Otras empresas del sector, como 888.com, ya han anunciado su intención se hacerlo también.
Y es que éste es un sector que está viviendo un crecimiento vertiginoso. Se calcula que en Internet hay entre 1.800 y 2.500 sitios de juego, que facturan unos 8.200 millones de dólares, según datos de la consultora estadounidense Christiansen Capital Advisors. El mercado crecerá, dice la consultora, un 22% al año, y sólo el negocio del póquer se multiplicará por seis hasta 2009.
En el horizonte, sin embargo, hay unas cuentas nubes. La principal es la regulación. La mayoría de estas compañías tiene su sede en paraísos fiscales, y su mayor mercado es el estadounidense: Partygaming asegura que el 50% de todo el negocio (unos 4.000 millones de dólares) se genera en Estados Unidos. Pero el Departamento de Justicia asegura que el juego por Internet es ilegal, según una ley de 1961 que prohíbe las apuestas deportivas interestatales e internacionales. Las compañías de juego aclaran que en sus páginas no se realizan apuestas deportivas, así que no creen que esta ley pueda aplicarse a ellas. Además, aclara Wheeler, "alrededor de 50 millones de americanos [estadounidenses] van al casino cada año y, de media, conducen dos horas para llegar [lo que sugiere que algunos salen de su Estado]. Hay 100 millones de ciudadanos de Estados Unidos que juegan al póquer, pero sólo el 5% lo ha hecho por Internet".
El problema legal se complicó aún más el año pasado, cuando la Organización Mundial de Comercio (OMC) apoyó una protesta de Antigua y Bermuda contra Estados Unidos por violar el libre comercio. Las web con sede en esos países se quejaban de que las leyes estadounidenses les habían hecho perder ingresos. Y la OMC les dio la razón. "Trabajaremos con la industria del juego en Estados Unidos y otros países para resolver estas cuestiones", dice Wheeler, sin especificar más. El problema legal, en todo caso, continúa. En el mundo hay unas 82 jurisdicciones distintas que regulan, de algún modo, el juego por Internet.
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