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Crítica:
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Ética profunda

"¿Moral? ¿Qué es eso? En la vida no hay moral, sólo naturaleza", dijo alguna vez la recién fallecida Françoise Sagan. La gran Sagan no tenía, ni podía tener, fundada idea todavía, hace cuarenta o cincuenta años, de lo que trata este libro. Que la naturaleza humana, considerada hoy desde la bioética, por ejemplo, es más profunda y decentemente animal que los desmandados instintos existencialistas que a ella misma le llevaron al desastre. Y que los propios conceptos de naturaleza y vida se han complicado enormemente con la tecnología, que ella ya utilizó a lo loco en su tiempo con sus imponentes Jaguar, Aston Martin y otros peligrosos caprichos. Quizá ni entonces ni ahora haya mucha moral en la práctica. Por eso, entonces y ahora, hace falta reflexión ética.

ELEMENTOS DE ÉTICA PARA LA SOCIEDAD RED

Javier del Arco

Dykinson. Madrid, 2005

860 páginas. 48,10 euros

En aquellos tiempos radicales Sartre nunca tuvo suficiente desparpajo para escribir una teoría ética, ni siquiera de la ambigüedad. Ahora se escriben demasiadas y muy ambiguas. Precisamente por eso hace falta reflexión y compromiso personal en este campo hoy más que nunca. Hacen falta convicciones. Simplemente para mantener el barco a flote. Una ética de la convicción que pase automáticamente a ética de la responsabilidad. Sobre todo en núcleos de poder.

Javier del Arco, biólogo y filósofo de formación, profesionalmente consejero científico-cultural de la Fundación Vodafone España, presenta en este libro un esfuerzo más que respetable para aclarar las cosas en este sentido. Y sabe de lo que habla. Un esfuerzo teórico y un esfuerzo práctico, desde fuera y desde dentro de la gran empresa. De una multinacional que, admirablemente, apoya una iniciativa así y con su respaldo se hace en cierto modo también responsable de ella. Por todo eso es más de agradecer este libro, nada ambiguo, a pesar de todo. Elaborado por un afable estudioso solitario. Individualista, sin escuela, maestros, conductores, a pesar de todo. "Cuya patria son sólo sus zapatos", escribe Fernando Vilches en el prólogo.

Un libro escrito en el lenguaje ético del "nosotros", que es el de lo bueno, como bien dice el autor, y no con la pretensión objetiva de verdad del lenguaje científico del "ello", ni con el prurito narcisista del estético del "yo". En este sentido, no pretende ser un ensayo de altos vuelos, pero por su erudición, franqueza y sabiduría, es mucho más que eso, aunque modestamente se autoconsidere una guía y un manual de instrucción de ética. Que no es poco. Se apoya en una conciencia clara: "A estas alturas de nuestra vida carecemos de compromisos ideológicos y lo único que poseemos son ideas". Ideas de compromiso, en tal caso, convicciones personales. Y en claros planteamientos: "La excelencia humana exige una vida solitaria y suprapolítica basada en una comprensión clara de la condición humana". Tanto para rendir cuentas a los accionistas como para rendirlas a la humanidad, dijéramos. El singular animal humano puede buscar en su fondo específico, tan oscuro como profundo, los patrones de conducta que no ha encontrado en las ligeras luces metafísicas, ni encuentra en las virtuales.

Elementos de ética para la sociedad red es, más que un libro de tesis, un amplio proyecto que trata de salvar las distancias entre los mundos humanístico y tecnocientífico, empresarial e individual. La idiosincrasia de su autor le permite entrelazar el pensamiento ético tradicional de Aristóteles, Hume, Kant, Nietzsche, etcétera, con cuestiones como la ética medioambiental, el principio de responsabilidad o la ética hacker. Dividido en tres partes, comienza con una historia filosófica de la ética hasta la actualidad, incluyendo a los ya clásicos John Rawls, Jürgen Habermas y Alasdair McIntyre. En éstos aparece ya el debate de la tecnología y la ética de modo que pueden servir de pauta para orientarse en las bases teóricas de la discusión actual sobre este tema. La segunda parte recoge el campo ético tecnológico que más repercusión social está teniendo: las ciencias de la vida. Desde la génesis de la biología en la evolución hasta la deep ecology, pasando por el principio de precaución de Hans Jonas, esta parte es casi una enciclopedia sobre la cuestión, muy valiosa por su capacidad orientativa. Finalmente, la última parte se refiere a las relaciones de empresa y sociedad desde el punto de vista ético: uno de los grandes temas que hay que explorar en la sociedad posindustrial, dado el poder cada vez mayor que las corporaciones ejercen en el mundo. De nuevo, desde las actuales éticas hacker hasta los pactos internacionales para el comportamiento ético empresarial -el Pacto Mundial de 1999 propuesto por Kofi Annan-, el lector encuentra un exhaustivo compendio de los problemas acuciantes que aparecen en estas relaciones un tanto ocultas, un tanto peligrosas, entre las multinacionales y la sociedad civil.

Pero, además de su modestamente autoproclamado carácter de guía y manual, como decíamos, el libro contiene análisis brillantes que en ocasiones superan también su carácter enciclopédico. (" Ha superado a Weber con su visión de la ética de la convicción y de la ética de la responsabilidad. Ha explicado a Habermas mucho mejor que el propio Habermas ", dice Vilches). Uno de estos análisis más destacables es precisamente el de la figura de Hans Jonas y de los principios de responsabilidad y precaución, cuya lectura resulta apasionante y oportunísima en este momento. Asimismo, no es nada desdeñable el carácter interdisciplinar que ostenta el libro, que facilita a los agentes económicos la comprensión del pensamiento ético y viceversa. En este sentido, al menos, este libro es el mejor ejemplo que puede encontrarse hoy en el panorama de la literatura ética en castellano.

Dykinson publica a la vez Ética para la sociedad red, del mismo autor, que constituye un estudio mucho más corto que el libro que nos ocupa, liberado de su parte más teórica: un extracto de aquellos aspectos más concretos suyos, que tienen que ver con la sociedad de la información, la tecnología en general y la empresa-red en particular.

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