España pone en alerta máxima a policía y Ejército

El presidente José Luis Rodríguez Zapatero ordenó ayer activar "de forma indefinida y hasta nueva orden" el plan de prevención de antiterrorista en su nivel de máxima alerta. Aunque el plan prevé aplicar este nivel cuando haya información creíble sobre una amenaza "inminente y real", el ministro del Interior, José Antonio Alonso, indicó que España tiene "el mismo nivel de riesgo que cualquier otro país de la Unión Europea".

A partir de ayer, unos 65.000 efectivos de la Policía y la Guardia Civil y 1.500 militares, repartidos en tres turnos, realizan tareas de vigilancia en infraestructuras, vías de comunicación e instalaciones estratégicas, con carácter disuasorio. El secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, remitió la orden 11/2005 a los delegados y subdelegados del Gobierno, instándoles a informar diariamente de la aplicación del plan, al tiempo que contactó con los principales ayuntamientos y con las comunidades autónomas con policía propia (Cataluña, País Vasco y Navarra) para pedirles su apoyo.

En Madrid, el dispositivo especial de vigilancia, con la colaboración de la Policía Municipal, incluye los autobuses municipales, la red de metro, las estaciones de tren y el aeropuerto de Barajas.

Por la mañana, Alonso reunió en la sede de Interior a los directores generales y subdirectores operativos de la Policía y la Guardia Civil. Fuentes policiales indicaron que la policía de Londres solicitó una reunión con expertos en información y en desactivación de explosivos (TEDAX) para conocer su experiencia de los atentados del 11-M.

Por la tarde, Rodríguez Zapatero reunió en La Moncloa el Gabinete de Crisis, aunque no se le quiso dar carácter oficial. Estuvieron, además del presidente, la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega; los ministros de Interior y Defensa, José Antonio Alonso y José Bono; el secretario de Estado de Seguridad; el director del servicio secreto CNI, Alberto Saiz, y el jefe del Gabinete de Presidencia del Gobierno, José Enrique Serrano.

A última hora, Alonso mantuvo una breve conversación telefónica con su homólogo británico, Charles Clark, a quien le ofreció toda su colaboración y le garantizó su asistencia a una reunión extraordinaria y urgente de los ministros de Interior de la UE si Londres, que ostenta la presidencia semestral, decide convocarla. También Bono garantizó al titular británico de Defensa, John Reid, todo el apoyo de los servicios de inteligencia dependientes de su departamento.