El Gobierno afirma que el trasvase del Tajo al Segura no incumbe a Castilla-La Mancha

Castilla-La Mancha no tiene nada que decir sobre el trasvase de 82 hectómetros cúbicos de agua del Tajo al Segura que el pasado viernes aprobó el Consejo de Ministros. El director general del Agua del Ministerio de Medio Ambiente, Jaime Palop, señaló que el envío "afecta a la agricultura, el turismo y el agua de boca de Murcia, Almería y Alicante" pero no a Castilla-La Mancha. Según Palop, Castilla-La Mancha tiene aseguradas sus necesidades aunque el año que viene "sea el más seco de la historia después de éste". El Gobierno castellano-manchego afirma que el trasvase pone en riesgo su abastecimiento.

Palop compareció ante la prensa para explicar, cinco días después, la decisión del Gobierno de trasvasar agua para riego y consumo del Tajo al Segura. "La cabecera del Tajo tendrá en todos los casos 240 hectómetros de reserva en los embalses de Entrepeñas y Buendía, de los que parte el trasvase, que es la cantidad que garantiza las necesidades de abastecimiento de la cuenca del Tajo, sus regadíos y sus usos industriales, energéticos y el caudal ecológico", afirmó el director general de Agua.

La regla de los 240 hectómetros no trasvasable, prosiguió Palop, la fijó el Plan de Cuenca del Tajo, de 1999: "Se fijó esa cifra para blindar la cuenca del Tajo y lo aceptaron todas las comunidades. Sólo se opusieron Ecologistas en Acción".

Por eso, y tras recalcar que el trasvase aprobado preserva los 240 hectómetros en los embalses de cabecera, Palop señaló que "la decisión de trasvasar agua o no afecta a los regadíos de Murcia y Alicante, al turismo de Murcia y Alicante y al agua de boca en Murcia, Alicante y Almería". La declaración de Palop llega después de que el ministerio haya criticado públicamente la oposición al trasvase del presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda.

Palop pasó a justificar el envío con el informe que la dirección general preparó para el Consejo de Ministros. Según éste, Agricultura estimó que era necesario un envío de 78 hectómetros para salvar los frutales del Segura. Medio Ambiente argumenta que se ha regado durante toda la campaña, por lo que basta con el 75% de esa cifra para los meses de julio y agosto. Como además hay 14 hectómetros ahora mismo en el trasvase camino de Murcia, el Gobierno redujo a 43 los hectómetros enviados para riego. Los regantes de Murcia han anunciado una protesta contra el envío por escaso y Castilla-La Mancha lo considera excesivo.

Palop afirmó que este trasvase es prudente y asegura el abastecimiento en Murcia aunque el próximo año hidrológico (a partir de octubre) sea seco y aunque aumenten las demandas de agua de la cuenca del Tajo y de las tablas de Daimiel, que también reciben agua del acueducto.

Medio Ambiente predice que, con más de un 90% de probabilidad y garantizando todos los usos, los embalses de cabecera tendrá un excedente de 388 hectómetros cúbicos en octubre de 2006 tras haber abastecido el consumo humano del Segura, todos los usos del Tajo y de Daimiel.

El ministerio ha estimado cuánta agua entrará en los embalses a partir de octubre. El año hidrológico 2004-2005 ha sido el peor desde que en 1912 existen registros y a los embalses sólo han llegado 359 hectómetros, cuando la media desde 1980 es de 804 hectómetros. Para el trimestre entre octubre y diciembre de 2005, el ministerio asegura que, con un 90% de probabilidades, llegarán al menos 90 hectómetros a los embalses. Ese trimestre es crucial porque suele ser el más lluvioso.

Para el año completo, el ministerio augura que las aportaciones a los embalses superarán los 670 hectómetros, más del doble que este año y 7,44 veces más que en el trimestre más lluvioso. Palop afirmó que el aumento en la previsión de todo el año respecto al periodo entre octubre y diciembre de 2005 se debe a que el lapso estudiado "es mayor".

El informe eleva las previsiones que realizó la Confederación Hidrográfica del Tajo, dependiente del ministerio. Este organismo hizo un informe para el ministerio el 23 de junio según el cual las aportaciones para el año que viene rondarán los 447 hectómetros, según otro cálculo de probabilidades.

Según el subdirector general del Agua, Joaquín del Campo, el informe de la confederación preveía que el año que viene sea "el más seco después de éste, algo muy difícil que ocurra". El informe de la confederación no precisa que ésa sea la hipótesis de partida.