Las tres capitales albergan todavía 20 gasolineras en áreas urbanas
En Bilbao y San Sebastián los conflictos han acabado en los juzgados
Las tres capitales vascas disponen aún de 20 gasolineras urbanas, pese a los cierres de los últimos años por las presiones vecinales, mientras que otras 34 ya se ubican en las afueras, en áreas comerciales o industriales. En Bilbao y San Sebastián hay varios litigios en los juzgados por la existencia de surtidores dentro de la ciudad. En Euskadi se cuentan ahora 293 estaciones de servicio, casi una veintena más que hace cuatro años.
La distribución de las estaciones urbanas es parecida en las tres capitales. San Sebastián y Bilbao disponen de siete y Vitoria, de seis, según los datos de la consejería de Industria. Sólo en la capital vizcaína se han clausurado tres gasolineras urbanas en el último decenio y otra dispone de la licencia pero permanece cerrada. Vitoria también vio como hace año y medio dejaba de funcionar una pequeña estación, con dos surtidores, tras una gran polémica.
Dada la persistencia de 20 servicios de suministro de combustible dentro de las ciudades, los problemas prosiguen. El más conflictivo es ahora el de la llamada gasolinera del RAG, explotada por Repsol en Bilbao. El conflicto de esta gasolinera, instalada en 1920, se remonta a finales de los 80 cuando el ayuntamiento bilbaíno detectó que carecía de licencia de actividad. El plan urbanístico de Bilbao, de 1995, confirmó el veto a esta instalación, que registró una explosión sin víctimas en 1997. En 2002 se intensificaron las protestas para su cierre; este año el área de Urbanismo decretó su cierre y el asunto ha acabado en los tribunales, que han negado la paralización de la actividad hasta que se resuelva el litigio. Pero la situación parece en vías de solución porque, según el Ayuntamiento, el propietario del inmueble está dispuesto a no prorrogar a Repsol el contrato, que expira el 27 de julio.
En Vitoria, la estación ubicada en la Avenida de Gasteiz tiene quejas vecinales desde hace varios años pero las negociaciones del Ayuntamiento con el propietario no han tenido éxito por las exigencias del dueño de una nueva ubicación y la recalificación urbanística. San Sebastián tiene también en los tribunales otros casos de gasolineras urbanas.
"Mientras cumplan la normativa de seguridad, nosotros no podemos hacer nada. Es cuestión de los municipios", explica José Ángel Cachorro, jefe del Servicio de Energía del Gobierno, quien destaca que estas instalaciones son todas antiguas. "Las que se instalan ahora se van a centros comerciales, polígonos, áreas de negocio".
Misma seguridad
Cachorro señala que las estaciones de suministro urbanas tienen las mismas condiciones seguridad que el resto, con pruebas anuales sobre el estado de los depósitos y revisiones periódicas cada cinco o diez. Sin embargo, la mayoría opta por las inspecciones cada tres o cinco años con el fin de evitar la paralización de la actividad que implica el vaciado de los tanques. Aunque haya instalaciones con más de 70 años de actividad, como ocurre en Vizcaya, todas las instalaciones principales se han renovado. "Con un tanque nuevo es como si fuera, a nivel de seguridad, una recién inaugurada", señala Cachorro.
Euskadi reguló esta actividad tras el más grave accidente ocurrido en los últimos 25 años. Fue además en una gasolinera urbana, en la localidad de Gernika, que provocó en 1989 la muerte de dos personas (un empleado y un técnico de Industria) tras una explosión provocada por el contacto de una chispa eléctrica con el gas de los combustibles. Aparte de este accidente, hubo otro siniestro mortal en 1998 en una estación de servicio situada a seis kilómetros de Vitoria, en la que falleció un trabajador por una explosión de gas en la tienda del área de servicio. La causa se achacó a fugas en dos depósitos de combustible.
De las 293 estaciones censadas ahora por Industria, 129 están ubicadas en Vizcaya, 112 se emplazan en San Sebastián y 52, en Álava. Respecto a 2001, existen una veintena más de gasolineras, debido a la proliferación en centros comerciales y en zonas periféricas de las ciudades, principalmente.
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