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Patronal y sindicatos cuestionan los planes de Nieto para la industria

Cierval, UGT y CC OO reivindican su papel como agentes sociales

Rafael Ferrando, Rafael Recuenco y Joan Sifre, máximos responsables de la patronal autonómica y los dos sindicatos mayoritarios, subrayaron ayer la vigencia del Pacto Valenciano por el Crecimiento y el Empleo (Pavace), señalaron la mesa de concertación que congrega a todos los agentes sociales como el ámbito adecuado para diseñar los planes sectoriales de competitividad que la Consejería de Empresa viene presentando para 11 sectores de la industria valenciana y pusieron en cuestión la viabilidad de lograr financiación de la Unión Europea para impulsarlos.

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Los sucesivos planes de competitividad presentados hasta la fecha por los responsables de la Consejería de Empresa en las sedes patronales de los sectores afectados (madera y mueble, calzado, cerámica, metal e iluminación y, ayer, juguete) han ido acompañados de comentarios críticos de parte de distintos portavoces sindicales y alguna advertencia desde la presidencia de la patronal provincial de Valencia. La ausencia de concertación con los sindicatos ha valido a cada uno de los documentos difundidos el calificativo de "plan patronal", pero sin mayores alharacas.

La mesa de concertación para la cuarta renovación del acuerdo de solución extrajudicial de conflictos laborales a través del Tribunal de Arbitraje Laboral que firmaron ayer Ferrando, presidente de Cierval, Recuenco, secretario general de UGT, y Sifre, secretario general de CC OO, se convirtió en plataforma de patronal y sindicatos para reivindicar su papel.

Los pactos sectoriales "devaluan nuestra representación", explicó Sifre, quien invocó la mesa de industria prevista en el Pavace como el foro adecuado para acordar estrategias de impulso económico. Sifre también recordó que la Unión Europea exige "el consenso entre patronal y sindicatos" para asignar fondos estructurales a proyectos para estimular la industria.

Recuenco, por su parte, lamentó que "haya que esperar a que el presidente de la Generalitat vaya a ver al ministro de Industria" para que puedan "conocer algo de los planes sectoriales". El dirigente de UGT subrayó "la torpeza" apuntada por el Consell al hurtar el diálogo social y recordó que el único documento visado por la Consejería de Empresa que ha llegado hasta la fecha a la mesa del Pavace, el plan de competitividad para el sector de la madera y el mueble, "fue rechazdo tajantemente - UGT nunca apoyará financiar despidos- y no sólo por UGT...". Recuenco dejó el relato en el aire para que tomara la palabra el presidente de Cierval.

Ferrando, fiel a su estilo, recurrió a un circunloquio para explicar su complicada tesitura. "Cierval reconoce las aportaciones de distintas federaciones" que se han concretado en los planes sectoriales presentados hasta la fecha, dijo el presidente de la patronal autonómica, "pero Cierval está obligada a pactar dentro de una mesa donde estén todos, dentro del Pavace, para eso está y es allí donde deben negociarse" los planes sectoriales.

Ferrando aseguró desconocer detalles sobre el número y vías de financiación de los diversos planes sectoriales que ha elaborado y elabora la Consejería de Empresa, pero sentenció que será imposible fijar las vías de financiación hasta que no estén "todos de acuerdo", en alusión a los agentes que ejercen la representación colectiva de los patronos y los trabajadores. El presidente de la patronal citó a Sifre y recordó: "No podemos demandar el dinero [a la Unión Europea] hasta que no estemos todos de acuerdo".

El máximo responsable de CC OO reservó sus comentarios más mordaces para el final. "La Generalitat se ha metido en un berenjenal en la acepción más suave", dijo Sifre, "lo que está haciendo es conformar grupos de presión para poder decir luego que estos planes tan magníficos no se hacen porque no hay voluntad por parte del Gobierno central". Y auguró "una frustración generalizada" entre los afectados como resultado de la política del Consell.

Sindicatos y patronal trabajan en la nueva redacción del Pavace, que expira en 2006, para adaptar las estrategias de crecimiento económico y fomento del empleo "a la liberalización comercial a la ampliación de la Unión Europea", en palabras de Rafael Montero, secretario de Cierval.

También subrayaron que el recurso al Tribunal de Arbitraje Laboral (TAL) para resolver conflictos colectivos ha redundado en el ahorro de tiempo y costes. El nuevo acuerdo incluye la posibilidad de elevar al TAL asuntos de seguridad en el trabajo siempre que estén recogidos en convenio colectivo.

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