Tres atracadores asesinan de un tiro a un joyero de Móstoles al decirles que estaban siendo grabados
Una mujer se entrega horas después de matar en Torrejón de Ardoz a su compañero sentimental
La región registró ayer dos homicidios en menos de 13 horas. Un vecino de Torrejón de Ardoz, Manuel del Río, de 41 años, murió apuñalado en su domicilio sobre las siete de la madrugada, mientras que un joyero de Móstoles, Antonio Sancho Arevalillo, de 54 años, falleció tras ser tiroteado a quemarropa y de espaldas por tres atracadores que irrumpieron en su tienda.
Poco después de las siete y media de la tarde, tres atracadores de origen sudamericano, entraron en una joyería del número 18 de la calle de Felipe II en Móstoles. Uno de ellos disparó al propietario del establecimiento, Antonio Sancho, de 54 años, causándole la muerte. Como botín se llevaron algunas joyas del establecimiento. Varios testigos aseguraron que los atracadores huyeron caminando, tranquilos y desaparecieron al doblar la esquina. En el momento del atraco, en la joyería estaba el fallecido y su hijo, que trabajaba con él, una dependienta del local y una clienta. Sancho tenía dos hijos y una hija, un nieto, estaba esperando una nieta, y regentaba otra joyería en Alcorcón, donde residía.
Unas 13 horas antes de este sangriento atraco, el teléfono de emergencias 112 recibió una llamada de un vecino de Torrejón que había hallado el cadáver de un hombre en el portal de una vivienda del número 4 de la calle de Irlanda. El fallecido, Manuel del Río Nuevo, tenía un puñal clavado en el hemitórax. Estaba separado, tenía un hijo de 11 años, vivía con una mujer ecuatoriana y era hermano de un concejal de la localidad. Era pintor, pero la falta de trabajo le había obligado a trabajar eventualmente de camarero. Estas personas le describen como una persona callada, "sin problemas con el alcohol o las drogas". Hacía muy poco tiempo que ocupaba la vivienda en cuyo portal fue encontrado, ya que se trata de bloques de nueva creación. Su pareja sentimental, Eniph Roxana Cedillo Barahona, una ecuatoriana de 22 años con la que convivía, se entregó por la tarde en la comisaría de Parla y confesó ser la autora del crimen.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.