La reforma de la Gardunya plantea conectar La Rambla y el antiguo hospital de Sant Pau
La Boqueria, la biblioteca y la Escola Massana quieren mejorar y ampliar sus instalaciones
La reforma de la plaza de la Gardunya, que se encuentra en pleno proceso de debate en el distrito de Ciutat Vella, va más allá de lo que es su perímetro estricto. Sobre la mesa hay varias propuestas. Una de las más ambiciosas, que representa a las actividades e instituciones de más peso del entorno de la plaza, plantea conectar de una forma clara La Rambla, a través del mercado de la Boqueria, con los jardines del antiguo hospital de Sant Pau, una propuesta que se ha llegado a formular en otras ocasiones y que no se ha llegado a ejecutar.
Esa conexión se dibuja permeabilizando más la Boqueria, que actualmente comunica con la plaza de la Gardunya a través de los porches. Algunas de las sugerencias que se hacen son eliminar las edificaciones de administración y los ascensores, además de anular la zona de carga y descarga de la parte trasera, partiendo de que esoss trabajos se puedan hacer en el subsuelo de un nuevo aparcamiento. Precisamente el aparcamiento es, si no la principal, uno de los factores que condicionan prácticamente toda la intervención de la plaza.
El actual aparcamiento tiene más de 300 plazas y la supresión de la planta de superficie supondrá hacerlo crecer por debajo, donde ahora tiene dos plantas. En el futuro aparcamiento se quiere situar los muelles de carga y descarga. Fuentes de Fomento de Ciutat Vella precisaron que la concesión del actual explotador del aparcamiento termina en 2008, pero que el distrito se ha planteado rescatar la concesión antes.
Las sugerencias que plantea el arquitecto Dani Freixa, en nombre de las principales actividades que rodean la plaza-la Boqueria, la Biblioteca de Cataluña, la Escola Massana, la Fundación Tot Raval y Amics de la Rambla- van en la línea de transformar lo que siempre ha sido un espacio desordenado y ligado a la trastienda de la Boqueria en una plaza con vida. Esto es, con bares, terrazas y un espacio público en condiciones. La plaza de la Gardunya en su actual configuración -desde que se construyó el aparcamiento, en 1967- es objeto de reforma aplazada desde el Plan Especial del Raval de 1985. Es un espacio que se ha degradado con el paso de los años y que, además, está rodeado de instituciones y actividad que quieren crecer. Los casos más claros son la Escola Massana y la Biblioteca de Cataluña, y otras de las actividades que se encuentran en el interior del conjunto del antiguo hospital de la Santa Creu.
Siguiendo con la propuesta conjunta, la permeabilización desde La Rambla no debería morir en la plaza de la Gardunya, sino que tendría que penetrar en los jardines del conjunto del antiguo hospital. Eso supondría eliminar las actuales edificaciones anexas a ese conjunto con frente a la calle de Floristes de la Rambla que actualmente están ocupadas en la planta baja por los talleres de la Escola Massana y en las plantas superiores por la biblioteca.
Esta supresión se ha planteado en anteriores ocasiones y ha sido discutida por las voces que defienden el valor arquitectónico de las edificaciones. Fuentes del distrito señalaron que se ha encargado un estudio histórico-arqueológico sobre esos edificios. Su supresión plantea tener que buscar un nuevo emplazamiento para las actividades que actualmente acogen. Siguiendo con la propuesta conjunta, esa edificabilidad se podría concentrar en el lado sur de la plaza, porque en el norte, donde ahora están las terrazas de dos bares, se prevé construir vivienda social.
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